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El embajador argentino ante la Organización de las Naciones Unidas, Jorge Argüello, negó que las diferencias acerca del reconocimiento de un nuevo Estado en Oriente Medio perjudique las relaciones bilaterales entre Buenos Aires y Washington. "Tenemos distintas miradas para la obtención de un idéntico resultado: necesitamos que prospere el proceso de paz en la región y que la solución nos devuelva dos Estados viviendo en paz y armonía".
Ayer, al hablar ante la Asamblea General, la presidenta Cristina Kirchner volvió a reclamar que Palestina sea aceptada como miembro pleno del cuerpo internacional, y advirtió que rechazar el ingreso del estado de Medio Oriente "es darle coartadas a los terroristas" para nuevos ataques. Estas palabras le valieron a la jefa de Estado una calurosa felicitación del titular de la ANP, Mahmoud Abbas, quien le agradeció su "valiente discurso".
Por lo contrario, el presidente estadounidense, Barack Obama, exigió a la ONU que rechace el pedido palestino. Según Argüello, "desde nuestra perspectiva y después de décadas de fracasos de la mesa de negociaciones en Medio Oriente, es necesario avanzar en el proceso de refundación del estado de Palestina como uno de los dos actores del proceso de paz". "Creemos que es un elemento nuevo que va a, seguramente, abrir puertas para una nueva etapa en la negociación. Esa es la posición argentina que en lo bilateral ya ha reconocido al Estado de Palestina y tenemos embajadas funcionando en ambos países", agregó.
"Mañana, el presidente Abbas va a anunciar en el pleno de la Asamblea General cuáles son los pasos, cuál es la estrategia que va a seguir Palestina para lograr el objetivo de ser reconocido estado miembro de las Naciones Unidas. Para que se pueda discutir esto debe mediar una propuesta del Consejo de Seguridad de la ONU, pero allí Estados Unidos ha anticipado que va a ejercer el derecho de veto que le concede la Carta de la ONU y por lo tanto va a abortar esa política que está levando adelante Palestina", prosiguió.
En otro orden, Argüello advirtió que "necesitamos crear las condiciones políticas propicias para que, en el caso de Malvinas, se pueda comenzar a dar cumplimiento con las muchas resoluciones de la ONU que con total claridad establecen que el Reino Unido de Gran Bretaña y la Argentina deben sentarse en una mesa bilateral a negociar la soberanía de las islas". "Lamentablemente esto no ha sido posible hasta ahora por la renuencia británica a dar cumplimiento a las resoluciones de la ONU", continuó.
Finalmente, el diplomático argentino celebró que Cristina Fernández manifestara su voluntad de iniciar un diálogo con Irán para que se juzgue a los ciudadanos de ese país asiáticos sospechados de haber participado en la voladura de la AMIA. "En el caso de Irán, nuestra posición es muy clara: debe intervenir la Justicia", explicó y subrayó que "hemos recibido en julio pasado un mensaje claro por parte de Irán expresando su voluntad de colaborar y de mantener un diálogo abierto. La Presidenta dijo que eso debe estar orientado necesaria y exclusivamente a que se haga justicia en el caso del atentado a la AMIA".
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