Tras pedir una cuestión de privilegio contra Carrió y Negri, el titular del bloque del Frente para la Victoria insistió en que Mirkin y Eliceche "son diputados que fueron elegidos por el pueblo de sus respectivas provincias. Seguramente, con más votos que los diputados que hicieron la imputación. Esos dos diputados están sentados acá, participando de las sesión, cumpliendo con el reglamento". Además, el legislador apuntó que lo que molesta a la oposición es que "un único espacio es el que construye colectivamente que pone lo colectivo antes de lo personal y lo individual".

Por otra parte, Laura Alonso del PRO planteó una cuestión de privilegio contra el camporista Andrés "Cuervo" Larroque, quien ayer la descalificó durante un cruce que la oposición tuvo con el canciller Héctor Timerman. "Fui agraviada", dijo la diputada, a quien ayer Larroque le dijo "callate atorranta", y a vez le pidió disculpas al kirchnerista "si se sintió ofendido" por la respuesta que le devolvió.

Ayer, la exposición del canciller ante el plenario de comisiones tomó temperatura cuando Rossi empezó a criticar una nota de opinión del legislador macrista porteño Sergio Bergman y recordó que Macri había designado como jefe de policía a Jorge Palacios, procesado en la causa por encubrimiento del atentado a la AMIA.

En ese momento, Alonso se paró y gritó: “¿Qué pasa, para Rossi no hay reloj?”, en referencia a los 10 minutos acordados en labor parlamentaria. A menos de un metro, el diputado kirchnerista Andrés Larroque le decía que se callara y se sentara. “Callate, atorranta”, le dijo y Alonso le replicó: “Parate y decímelo, prendé el micrófono y decímelo”, y completó la escena al grito de “cagón”.