El Programa Verdad y Justicia del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos fue el que elevó un informe a la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad del Ministerio Público Fiscal, que lo remitió al fiscal en lo Criminal y correccional de San Martín Miguel Blanco García Ordás, a cargo de los delitos de lesa humanidad perpetrados en Campo de Mayo.

El fiscal completó la investigación con la extrema celeridad que requería el caso y de inmediato solicitó su detención a la jueza federal de San Martín Alicia Vence, quien lo indagaría mañana.

El Programa Verdad y Justicia, el Ministerio Público Fiscal y los querellantes de la causa “Campo de Mayo” venían tratando de identificar a Villanova desde hace mucho tiempo, y durante la última semana el equipo de profesionales accedió a información, luego chequeada y corroborada, que permitió dar con la identidad del represor.

Uno de los sobrevivientes de Campo de Mayo, Juan Carlos Scarpati –ya fallecido-, explicó en sus declaraciones ante la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) que el represor conocido como “Gordo 1” pertenecía al Grupo de Tareas 2, y que dicho grupo fue el principal responsable de la detención, interrogación y tortura de los militantes de la organización política Montoneros.

Carlos Francisco Villanova fue miembro de la PFA, integrante del Cuerpo Especial de Informaciones –Cuerpo de élite dedicado a realizar tareas específicas de inteligencia- y prestó servicios en la Dirección General de Inteligencia desde 1976 a 1978 bajo el nombre de cobertura “Claudio Federico Vargas”.

Durante su permanencia en aquella dirección, fue enviado en comisión de servicio al Grupo de Tareas 2 del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército Argentino, en el que adoptó el alias Gordo 1 con el que era conocido en Campo de Mayo.