El candidato a rector de la UBA que apoyará la mayoría. Las condiciones en que se hará la asamblea. El pedido de control policial ante las protestas estudiantiles. Todo eso se definirá mañana, en una reunión que mantendrán los decanos y consejeros del bloque que integran radicales, peronistas y otros aliados, con la mira puesta en el lunes, cuando por quinta vez se intentará elegir al titular de la universidad. Declinada la candidatura de Atilio Alterini al rectorado, desde hace días está planteada la disyuntiva entre Alberto Boveris, decano de Farmacia y Bioquímica, y Aníbal Franco, actual vicerrector. Pero aún no se alcanzó consenso en uno u otro sentido. En cualquier caso, los estudiantes de la FUBA ratificaron que, nuevamente, se movilizarán para impedir la elección. La asamblea fue convocada para el 17, a las 9, en el Colegio Nacional de Buenos Aires, con dos puntos en su temario. Primero, elegir al rector, una designación que debió concretarse a principios de abril, pero fue sucesivamente frustrada por protestas de la federación estudiantil. Y el segundo punto será la apertura del proceso de reforma del estatuto de la UBA.

Pese a las derivaciones del conflicto, el escenario político no se modificó demasiado en la UBA. Como espacio opositor se mantienen los decanos y consejeros de Sociales, Filosofía y Letras, Arquitectura y Exactas, que postulan como rector al científico Alberto Kornblihtt. Un sector aparte es Agronomía, desde donde surge la candidatura de Fernando Vilella. Y el bloque de mayoría sufrió la renuncia de su cuestionado candidato pero se mantuvo unido, con sustento en Derecho, Económicas, Farmacia, Ingeniería, Veterinarias, Medicina, Psicología y Odontología. Sus miembros asumieron el compromiso de definir una candidatura mañana.

Hasta ayer parecía más probable que se confirmara la postulación de Boveris, quien ha ratificado su voluntad de ser rector. Mayormente radicales, sus partidarios resaltan “el prestigio académico” y “la experiencia de gestión” del investigador: “Es un profesor internacionalmente reconocido que empezó como ayudante docente y pasó por todas las instancias de la carrera académica. Conoce muy bien la universidad –se comentó–. Su experiencia de gestión puede ser fundamental en un medio de una crisis que ya lleva seis meses y que no la va a resolver una persona sola.” Los que no se convencen creen que su nombre será calificado de shuberoffista, por haber sido vicerrector del ’94 al ’98.

En cambio, quienes promueven a Franco, ex decano de Veterinarias, destacan su perfil más político y “su capacidad de diálogo”. Insisten en que, desde la asunción del vicerrector, “la UBA se puso en marcha. Además, Franco podría sumar votos por fuera del bloque y tendría más capacidad de entendimiento con las demás facultades”. A la vez, destacan su mayor llegada al Gobierno, dada su condición de peronista. Sin embargo, esa filiación algunos la consideran una desventaja: “Sería el mejor candidato, pero quizá no sea éste el mejor momento, porque las urgencias presupuestarias son muy serias y va a haber una discusión fuerte con el Gobierno. El mismo Franco plantea que está recibiendo muchas presiones de funcionarios”, confió un consejero radical. En contraste, consejeros peronistas supeditan la postulación de Franco a que el bloque le dé libertad para armar un gabinete de gestión, conformación que también se discutirá mañana, al margen de los candidatos.

Otro asunto a definir es la restricción del ingreso público en la asamblea y el llamado de la fuerza policial como custodia. Eso es lo que pretende el bloque mayoritario, pero aún busca consensuarlo con los sectores opositores, que lo rechazan. En ese caso, el pedido lo haría el vicerrector como presidente de la asamblea. Y persistirá la incógnita de si el Gobierno mandará o no a la policía: hasta ahora, se repitió que la UBA debía definir el conflicto haciendo uso de su autonomía. Igual, el copresidente de la FUBA Juan Pablo Rodríguez confirmó: “Vamos a movilizarnos y a tratar de impedir que la asamblea sesione, porque ya demostró que avala todo tipo de truchadas”. Las agrupaciones de izquierda reclaman que, antes de elegir rector, se democratice el cogobierno. “La idea es tomar el colegio el lunes a la mañana. Y, si está la policía, haremos un piquete en la puerta para que no entren los asambleístas.”