UNIVERSIDAD › CAMBIO DE MANDO EN LA ORGANIZACION ESTUDIANTIL
Una FUBA más a la izquierda
Desde esta semana, la federación de la UBA es presidida por un militante del MST, cuyo objetivo es incrementar la participación.
“El principal objetivo es avanzar en la participación y democratización del movimiento estudiantil y la política universitaria”, definió el nuevo presidente de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA), Agustín Vanella, un estudiante de Abogacía de 23 años. La FUBA cumplió estos días sus primeros seis meses sin Franja Morada en la conducción, algo que no ocurría desde 1983. Las agrupaciones independientes que tenían la presidencia se la cedieron a la izquierda, como habían acordado hacia dentro del Frente 20 de Diciembre al desplazar el año pasado al radicalismo universitario. El nuevo titular de la federación viene de las filas del MST y reemplaza a Iván Heyn, militante de TNT.
El traspaso de mando se concretó el viernes pasado, cuando Heyn renunció para que asumieran Vanella y Natalia Souto, de la Venceremos, como vice. Ayer, en diálogo con Página/12, Vanella apuntó que en el primer semestre “se hizo una muy buena gestión. Franja dejó una federación vacía y ahora tiene superávit”. Entre los proyectos que impulsará, propuso “trabajar para modificar el estatuto de la FUBA y adecuarlo a la nueva realidad del país”; “asignar 20 mil becas de apuntes para los estudiantes”; “luchar por un boleto estudiantil y más ayudas económicas de la UBA para los alumnos”; y “exigir que se cumpla con el presupuesto universitario”.
Pero el proyecto central será el político, “que es en lo que faltó avanzar en estos meses”, según estimó el nuevo dirigente de la federación que representa a los 250 mil alumnos de la universidad. “A fines de agosto vamos a convocar a un congreso extraordinario, con delegados elegidos por asambleas de todas las facultades, para discutir la situación nacional y un plan de lucha. Queremos integrar a la FUBA con otras organizaciones sociales: con los piqueteros, las asambleas barriales, los organismos de derechos humanos –contó–. La idea es que la FUBA tienda un puente para lograr una mayor integración social. Y que se convierta en una suerte de mesa que exceda las reivindicaciones estudiantiles.”
Tanto el presidente entrante como el saliente llegaron a comandar la federación desde el Frente 20 de Diciembre, organizado por agrupaciones independientes y de izquierda a fines del año pasado para participar del congreso de FUBA. Aquel congreso fue el que le dio salida a Franja Morada, tras 18 años de hegemonía. Sobre los 124 delegados estudiantiles que estuvieron presentes, el frente recibió 61 votos; Franja 33; el Movimiento Nacional Reformista (PSP) sumó 12; la Corriente Estudiantil Popular Antiimperialista (CEPA) 11; y la JUP 7. Todas esas agrupaciones tienen, hasta fin de año, representación en la mesa ejecutiva de la FUBA, el organismo que nuclea a los trece centros de estudiantes de la UBA.
La continuidad del frente que se alzó con la conducción es una incógnita. La izquierda parece querer potenciar la alianza: “Vamos a apostar a que la mesa política del frente funcione más cohesionadamente. Eso no se logró, pero vamos a intentarlo porque hay acuerdos políticos básicos”. Sin embargo, los independientes están lejos: “Va a ser muy difícil. El Frente 20 de Diciembre nació para desplazar a la Franja, que todos considerábamos un actor nefasto para el movimiento estudiantil. Pero tenemos disidencias muy importantes con las agrupaciones de izquierda -admitió Iván Heyn–. Los independientes somos organizaciones más horizontales, mientras la izquierda tiene una lógica más tradicional y partidaria”.
El ya ex titular de la federación puso en el haber su gestión “la normalización administrativa de la FUBA”: “En seis meses sistematizamos la producción de apuntes, ordenamos los convenios y terminamos con la estructura clientelística que había dejado la Franja. Bajamos los apuntes a mitad de precio, aun comiéndonos la devaluación”. En el debe: “Me hubiera maravillado una movilización estudiantil masiva, asambleas multitudinarias delineando el futuro. Pero nos tocó un proceso de repliegue después de diciembre. Ahora parece que está volviendo la participación. Ojalá”.