- “(Guillermo) Jaim Etcheverry sabe que aparece como el único candidato opositor. Su estrategia es no cerrar acuerdos con ninguno de los diversos sectores que lo apoyan, porque en la primera vuelta no va a ganar ningún candidato –contó uno de sus operadores–. En ese escenario, él quiere ser el más independiente de todos. Esa fortaleza suya es la mayor debilidad de los demás candidatos.” Así intentan explicar por qué Jaim no ha salido aún a definir cuál es su programa y cuáles sus ideas para la UBA.
- “Entre (Alicia de) Camilloni y (Susana) Mirande estamos juntando unos 95 a 100 votos para la asamblea –aseguró un radical que apoya a la primera–. Y el espacio de Jaim suma entre 70 y 75. En la primera vuelta, todos los candidatos se van a presentar separados, pero después no creo. Incluso, no descartamos que se pueda consensuar entre Alicia y Susana antes de llegar a la asamblea”, agregó.
- “Nosotros somos los más modestos. Los demás dicen que van a ganar. Por ahora tenemos pocos votos, pero tenemos un proyecto firme y podemos armar una coalición interesante dentro de la asamblea”, dijo otro radical, que trabaja por el triunfo de Mirande.