Un día después de la asamblea que selló la despedida de uno y la unción del otro, Oscar Shuberoff y Guillermo Jaim Etcheverry se tiraron flores en un brindis ofrecido anoche para agasajar al nuevo rector electo de la Universidad de Buenos Aires.
“Asumir el rectorado implicará un sacrificio muy grande para mí y me siento abrumado por esta responsabilidad porque la universidad es un patrimonio que hay que cuidar”, dijo Jaim Etcheverry durante el agasajo realizado en la Facultad de Medicina. “La sociedad reclama cambios, por lo que valoro que la universidad haya dado un ejemplo en ese sentido”, agregó el ex decano de Medicina. Luego, Shuberoff dijo que Jaim Etcheverry “no debe sentirse abrumado” porque tiene “con qué” hacerse cargo de la UBA. Y aclaró que estaba allí “en carácter de amigo”. “Jaim tiene todo lo que hay que tener para ser querido” y, dirigiéndose al médico, pidió: “No tengas miedo, te va a ir bien, nos va a ir bien, te vamos a ayudar”.
Jaim Etcheverry, que se negó a hacer declaraciones sobre su futura gestión al frente de la universidad, fue agasajado por los decanos de las facultades de Medicina, Veterinaria, Ciencias Sociales, Odontología y Arquitectura, y por el titular de la Escuela Carlos Pellegrini, entre otros. El rector saliente aseguró: “Ahora me voy dedicar a buscar trabajo”. Dijo que tiene ofertas “en el país y en el extranjero”.