El cuento por su autor

“Viva Perón” es un cuento que pertenece al libro Rock barrial (Norma, 2010; reedición próximamente por Interzona), aunque fue publicado anteriormente con el título “VP” en la antología Un grito de corazón, compilada por Damián Ríos y Mariano Blatt para Mondadori.

Está basado en una anécdota de la infancia: la primera vez que canté la marcha peronista. Aunque históricamente la Iglesia en su jerarquía fue una institución antagónica al peronismo, en una parroquia de barrio no necesariamente se seguía esa línea. Justamente fue el caso del Sagrado Corazón de Villa Celina.

En mi infancia y adolescencia participé activamente de los grupos juveniles. Allí, muchos de los laicos, seminaristas y curas adscribían al peronismo y nos influenciaron a los más chicos, especialmente dos sacerdotes, que aparecen en el cuento, y que se refieren a personas reales: el padre Fernando y el padre Franco. Este último (hoy fallecido), había trabajado en villas de Lugano y en la Villa 31 de Retiro junto a los curas tercermundistas. El Padre Franco, además, era poeta. Un día me regaló un ejemplar de su libro Sonidos y silencios –que aún conservo– escrito en el exilio durante la dictadura. Me lo dedicó así: a Juan Diego, Joven con inquietudes y amor a su Pueblo. Con aprecio y cariño, P. Franco Festa.

El padre Franco contó en una entrevista que publicó sus primeros poemas a pedido del padre Mugica quien le dijo: “Franco, hay que publicar esos poemas tuyos, porque son una forma más de estar al lado del Pueblo”. Fue él quien prologó otro de sus libros: “La Juventud del Pueblo Centinela”.

Entre los distintos poemas que componen Gritos y silencios, hay uno muy sencillo que me gusta especialmente:

CHANGUITO

Al amanecer/ Con tu carrito/ Vas/ Con afán/ Por las calles/ De la ciudad/

Changuito/ En busca/ De pan/ Vas/ A luchar/ Contra el hambre/ Y la sociedad/ De la muerte/ Vas/ A buscar/ Los trozos/ En el basural/ Al atardecer/ De la ciudad/ Changuito/ Vuelves con sudor/ En tu carrito,/

Llevando/ Una flor/ De papel.