El 67 de los especialistas en Recursos Humanos de empresas del país no cree que la dolarización que impulsa el candidato Javier Milei sea una medida favorable para el mundo del empleo, según surge de una encuesta realizada por Bumeran, la principal plataforma de búsqueda de empleo en Argentina y Latinoamérica. De acuerdo a este sondeo, que reunió a 390 especialistas en recursos humanos, el 49 por ciento considera que la dolarización podría elevar la inestabilidad laboral y un 33 por ciento afirma que si se concreta deberá reestructurar sus equipos de trabajo para reducir costos ante el cambio de moneda de curso legal.

La encuesta de Bumeran también recala sobre el impacto que tuvo el proceso electoral sobre el mundo laboral: ¿se está contratando mano de obra?, ¿qué pasa con los salarios?, ¿cómo se sienten las personas trabajadoras?, ¿cuáles son sus principales incertidumbres?, ¿despidieron o pueden llegar a despedir gente? Esas fueron algunas preguntas realizadas. La mayoría de los encuestados destaca que el clima de incertidumbre pre-electoral es perjudicial para las dinámicas de empleo, no obstante el 62 por ciento aseveró que no despidieron ni planean despedir personal. En cuanto a los salarios, son poco alentadoras las perspectivas. Se habla de ajustes que acompañen la inflación o solo subas por los bonos decretados por el gobierno.

El impacto de la dolarización

El 67 por ciento de los especialistas en Recursos Humanos no cree que la dolarización sea una medida favorable para el mundo del empleo. Al indagar acerca de las razones, el 49 por ciento especificó que podría aumentar la inestabilidad laboral debido a la dependencia de la economía global, el 38 por ciento dijo que podría afectar negativamente a la economía de las organizaciones y provocar despidos, el 37 por ciento también justificó su percepción negativa indicando que la dolarización podría requerir ajustes fiscales que impactarían en la contratación laboral. No obstante, el 30 por ciento de los encuestados también destacó que podría aumentar la estabilidad salarial al reducir la inflación, el 21 por ciento dijo que podría impulsar el empleo en el sector importador al facilitar las transacciones internacionales y el 15 por ciento declaró que podría implicar aumentos en los salarios en dólares.  

La información se recabó en un estudio denominado Cómo impactan las elecciones en el mercado laboral. Bumeran es el portal online de empleo más grande de América Latina, con presencia en Argentina, Chile, Ecuador, Perú y Panamá. Su sitio recibe más de 10 millones de visitas por mes.

Al ser consultados sobre qué medidas implementarían frente a un escenario de dolarización, el 39 por ciento de los profesionales de Recursos Humanos respondió que deberían comunicar de manera transparente los efectos posibles en los salarios y beneficios, el 33 por ciento sostuvo que debería restructurar sus equipos para reducir costos, el 32 por ciento mencionó la necesidad de brindar capacitaciones a los empleados sobre cómo gestionar sus finanzas en ese entorno y un 28 por ciento habló de ajustar las estrategias de inversión y financiamiento. El hecho de que un tercio de las empresas encuestadas reconozcan que pueden achicar personal ante un cambio tan rotundo en la macroeconomía, representa sin dudas un llamado de atención.

Cómo afectan las elecciones

Respecto al impacto de las elecciones presidenciales en el mercado laboral, el 68 por ciento de los especialistas en Recursos Humanos evaluó que era negativo. ¿De qué forma? El 87 por ciento sostuvo que la incertidumbre política se traslada al mercado laboral, el 60 por ciento dijo que provoca una perdida de valor de los salarios, el 43 por ciento también mencionó como una causa negativa que se congela el reclutamiento de nuevos talentos y el 41 por ciento sostuvo que se produce una baja del empleo formal.

En cuanto a la percepción de las personas trabajadoras respecto al impacto de las elecciones, la encuesta relevó la opinión de 2.278 empleados, el 66 por ciento sostuvo que el impacto en el mercado laboral es negativo y solo el 11 por ciento habló de un efecto positivo, mientras que el 23 por ciento restante dijo que no afecta ni positiva ni negativamente. 

El 65 por ciento de los trabajadores sostuvieron que están atravezando este período electoral con preocupación, el 35 por ciento con angustia, el 26 por ciento con ansiedad el 18 por ciento con enojo y solo el 15 por ciento se declaró esperanzando. 

Cuando les preguntaron cuáles son las principales preocupaciones que enfrentan las personas trabajadores durante el período electoral, el 62 por ciento hizo referencia a la inestabilidad económica personal, el 57 por ciento sostuvo que le preocupa que la inflación sea mayor al incremento salarial, el 48 por ciento puso el foco en los cambios en el costo de vida y el 46 por ciento en la inseguridad laboral. 

Por último, cuando se consultó a los especialistas en recursos humanos sobre cuáles son las principales preocupaciones de las empresas durante el período electoral, el 76 por ciento respondió que es la inflación, el 75 por ciento la incertidumbre económica, el 46 por ciento las demandas salariales difíciles de alcanzar con el presupuesto actual, el 43 por ciento los cambios en las políticas y el 40 por ciento el malestar por parte de los empleados.