Luego de 19 horas de discusión, el oficialismo logró aprobar en Diputados la ratificación de la resolución 125 sobre las retenciones móviles (129 votos a favor, 122 en contra y 2 abstenciones) e introdujo las modificaciones en beneficio de los pequeños y medianos productores anticipadas por Agustín Rossi, jefe de la bancada K, durante su intervención en el recinto. Durante la madrugada del sábado, en pleno debate, el oficialismo seguía negociando con su propia tropa y algunos aliados para lograr los votos necesarios. Incluso continuaron los contactos con la Federación Agraria, vía el bloque Solidaridad e Igualdad (SI), que conduce Eduardo Macaluse. “No fue una disputa cabeza a cabeza pero sí resultó una votación peleada”, reconoció a PáginaI12 Patricia Fadel, secretaria parlamentaria del bloque K y una de los principales negociadores dentro del oficialismo en Diputados. La oposición (PRO, UCR, Coalición Cívica) consideró el resultado como una victoria propia, por la sumatoria de negativas al proyecto oficial, mientras que desde la Federación Agraria, a pesar de insistir en que las concesiones fueron insuficientes, se mostraron satisfechos por las modificaciones a la ley, a diferencia de la Sociedad Rural y Confederaciones Rurales. La disputa se traslada ahora al Senado.

“Vamos a dar el quórum con 129 diputados. Y si damos el quórum, ganamos, no importa que sea por uno”, había anticipado a este diario José María Díaz Bancalari antes de que se iniciara la sesión. La votación estaba pautada entre los jefes de los diferentes bloques para realizarse a las 12 del mediodía de ayer. Cerca del mediodía, Felipe Solá entraba y salía del recinto. Sólo se sentó en su banca cuando tuvo que votar. El último discurso de las 19 horas de debate fue el del kirchnerista Edgardo Depetri. A los gritos, terminó diciendo: “¡Producimos alimentos para 400 millones de habitantes, pero primero tenemos que alimentar a los 40 millones de argentinos!”.

Para ese momento, “las barras” –como las llamaba el presidente de la Cámara, Eduardo Fellner– comenzaron a cantar “¡hay que votar, hay que votar, las retenciones del gobierno popular!”. El primero y tercer piso estaba ocupado por militantes de Barrios de Pie, Libres del Sur y José C. Paz, mientras que en la bandeja del medio estaban los de Pampa Sur, que una vez terminada la votación, se fueron sin decir ni mu.

En medio de los cánticos y las interrupciones de algunos legisladores que querían dilatar la votación, llegó el momento de la definición. Habían pasado 15 minutos de la hora pautada, cuando el tablero del recinto arrojó que 128 diputados habían votado por la afirmativa (luego se sumó el voto de Nancy Gonzales, del Frente para la Victoria de Chubut, que había sido mal registrado). Por la negativa votaron 122 legisladores y 2 se abstuvieron. El bloque K contó con 111 legisladores propios y 18 aliados.

A pesar de que los legisladores aprovecharon algunos sillones para descansar un poco, la madrugada fue movidita. “Con las modificaciones que anunció Agustín (Rossi), las posibilidades (para la negociación) se abrieron”, indicó a este diario una fuente de la presidencia del bloque kirchnerista.

- Dos legisladores del Frente para la Victoria por Río Negro, Julio Arriaga y Cipriana Rossi, que habían firmado el dictamen del proyecto de Solá y Laura Montero, terminaron votando por la iniciativa oficial. Desde el bloque oficialista dejaron trascender que dentro de los proyectos que faltan tratar (ver aparte), uno será sobre la eliminación de las retenciones para la producción de peras y manzanas, dos frutas bien rionegrinas.

- Las abstenciones fueron de Leonardo Gorbacz (SI, Tierra del Fuego) y Marta Osorio (FpV, La Pampa).

- Entre los aliados del oficialismo, estuvieron 6 legisladores de la Concertación –conformada por radicales K, que votaron divididos–. Cuatro del Encuentro Social y Popular, bloque que conduce el socialista Ariel Basteiro y que integran Vilma Ibarra, Victoria Donda y Cecilia Merchan; 5 del Frente Cívico de Santiago del Estero, y tres monobloques. Cuatro diputados de la Concertación (radicales K)votaron en contra.

“Lo tuvimos ahí, fue un final abierto. Algunos de Felipe (Solá) se dieron vuelta”, aseguró a este diario el radical Pedro Morini.

Por su parte, el fueguino Gorbacz aseguró que su abstención fue por convicción y sin ningún apriete. “Coincido conceptualmente con las retenciones móviles y si bien el proyecto oficial era mejorable, tampoco era para rechazarlo”, aseguró el legislador que integra el bloque SI. Su bancada estuvo negociando para consensuar con la FAA, pero terminó votando por la negativa.

Artículo por artículo

Luego de la votación general, se pasó al repaso de cada uno de los artículos. Los dos primeros fueron los más polémicos: la ratificación de la resolución 125 y el segundo, la potestad del Ejecutivo para fijar su política económica, modificando el Código Aduanero. El famoso “ratifíquese” de las retenciones móviles fue aprobado por 122 votos a favor, 106 en contra y 2 abstenciones. De ahí en más, se revisaron los siguientes 26 artículos del proyecto, con las modificaciones anticipadas por Rossi.

- Artículo 3: Las compensaciones se devolverán a través de una Clave Unica Bancaria.

- Artículo 4: El límite para recibir compensaciones serán las 1500 toneladas.

- Artículo 6: Se produce una segmentación en los pequeños productores que cosechen hasta las 300 toneladas, que deberán pagar una retención del 30 por ciento. Para los que producen entre 300 y 750, las compensaciones representarán unas retenciones del 35 por ciento. Y entre las 750 y 1500 toneladas, los productores pagarán 35 por ciento de retenciones hasta las 750 toneladas y el resto tributarán las alícuotas de la resolución 125.

- Desaparece la cantidad de hectáreas (150 para la zona pampeana y 350 para el resto) como límite para recibir compensaciones.

- Artículo 22: Se modifican los fines del Fondo de Redistribución Social. El 50 por ciento del Fondo será para hospitales, el 20 para viviendas populares, otro 20 por ciento para caminos rurales y un 10 por ciento para el fortalecimiento de la agricultura familiar, una de las últimas modificaciones incluidas en el proyecto.

Todos estos beneficios, que según Rossi apuntan a “incluir al 85 por ciento de los productores”, tendrán vigencia desde el 13 de marzo hasta el 31 de octubre, justo el mes que da comienzo a la próxima campaña de soja. “Yo a K (por Néstor Kirchner) no le creo. Hasta que no vea en papel todas estas modificaciones y la ley pase por el Senado, no vamos a cambiar de postura. Pero hay que reconocer que los pequeños productores van a pagar el 30 por ciento de retenciones”, indicó a este diario Pedro Peretti, dirigente de la Federación Agraria, que al término de la votación se abrazó con Agustín Rossi, al igual que Eduardo Buzzi.

“La verdad es que se hizo un buen trabajo en favor de los pequeños productores”, señaló a este diario Patricia Fadel.

–Concedieron mucho a los ruralistas, sobre todo a la Federación Agraria. ¿Qué faltó para que dieran su apoyo definitivo al proyecto del Ejecutivo? –preguntó PáginaI12 a Fadel.

–Al campo siempre le falta un poco. Espero que esta ley sirva –concluyó la legisladora.