Pese a que los gastos primarios superaron a los ingresos fiscales en diciembre en más de 8100 millones de pesos, el 2011 cerró con un superávit primario de 4919,7 millones, según informó ayer el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, acompañado por su antecesor y actual vicepresidente de la Nación, Amado Boudou. Computando el pago de intereses de la deuda, que el mes pasado fue particularmente fuerte por el vencimiento de los bonos con cupón PBI, el saldo negativo se eleva a 22.354 millones de pesos en diciembre y a 30.663,8 millones en el año. “El superávit no es un fin en sí mismo”, manifestó Boudou en la conferencia de prensa, “es la herramienta que le permite al Gobierno lograr más y mejores trabajos, aumentar las retribuciones a los jubilados, seguir mejorando la educación”, enumeró el vicepresidente.

Según explicó la cartera económica, en diciembre se pagaron 10.188,80 millones de pesos por intereses de títulos en moneda extranjera, una cifra equivalente a lo que se había pagado por el mismo concepto a lo largo de los 11 meses anteriores. La razón es que en el último mes del año venció el pago del cupón que premia a los tenedores por el crecimiento del producto bruto interno del año anterior. “Este pago no se realizó en 2010 debido a que en 2009 el crecimiento efectivo estuvo por debajo de la base proyectada”, señala el comunicado del Palacio de Hacienda. “El pago del cupón PBI influyó para que al cierre de 2011, el resultado financiero fuera negativo en 30.663,8 millones de pesos.”

Este pago de compromisos se realizó, como otros en el transcurso del año, con la utilización de reservas en dólares del Banco Central. Lorenzino destacó que durante el año corriente se seguirá usando el mismo recurso “hasta el límite establecido por ley”. El esfuerzo fiscal permitió mantener durante el último ejercicio la política de desendeudamiento que, según destacó Boudou, permitió reducir el nivel de deuda bruta de una proporción del 166 por ciento del producto bruto en el año 2002, al 42 por ciento al 30 de septiembre pasado. El nivel de deuda con acreedores privados representa la tercera parte de la deuda pública total, por lo cual la relación de deuda con acreedores privados respecto del PBI es de sólo el 14,1 por ciento. En ese sentido, tanto Boudou como Lorenzino precisaron que en 2011 se abonaron alrededor de 35.590 millones en concepto de intereses, contra 22.103 millones erogados en 2010.

Además del vencimiento de deuda, también incide en el resultado de diciembre el aumento de gastos de las distintas reparticiones por las partidas remanentes ya presupuestadas –que si no se gastan antes de fin de año ya no pueden utilizarse– y el pago de aguinaldos. Los recursos totales en diciembre sumaron 41.224,5 millones de pesos, mientras que los gastos totales ascendieron a 63.578,5 millones, con un resultado negativo de 22.354 millones de pesos.

Boudou reclamó que la presentación de las cuentas públicas no se limite a “una discusión de académicos, sino (que sirva) para que se entienda el sentido del gasto”. “Ante un viento de frente que presenta la economía internacional –subrayó– el gobierno argentino alienta la inversión en capital, en infraestructura, para dinamizar la economía”, cuya consecuencia fue lograr un crecimiento a un ritmo del 9,2 por ciento en 2011 (cifras a noviembre) y bajar la desocupación al 7,2 por ciento (datos del tercer trimestre).

El vicepresidente de la Nación señaló que durante 2011 se verificó un incremento del 40 por ciento de la inversión real directa, sobresaliendo los emprendimientos administrados por Vialidad Nacional. Destacó que el Gobierno retomó importantes obras “inconclusas durante décadas” que resultan fundamentales para la infraestructura y desarrollo del país, como la terminación de Yacyretá, la central nuclear Atucha II y la culminación de la Autopista Rosario-Córdoba.

“La política fiscal sostenida durante estos años ha sido un pilar fundamental del modelo productivo con inclusión social”, remarcó Boudou, quien auguró que “el superávit primario se va a seguir manteniendo, redistribuyéndolo en pos del mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos y del fortalecimiento productivo y de la infraestructura del país”.