El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, encabezará hoy una misión comercial a San Pablo al frente de 580 empresarios, con el objetivo de incrementar las exportaciones y reducir el déficit estructural en el intercambio bilateral. Según explicó a Página/12 un empresario de la delegación, la intención es invertir la lógica de la negociación con el país vecino. En lugar de primero permitir el ingreso de los camiones brasileños frenados en la frontera, Moreno buscará cerrar compromisos de compra de productos argentinos para luego flexibilizar la entrada de bienes del país vecino. Intentará que productos como la naranja, con barreras paraarancelarias, logren ingresar al mercado brasileño.

El encuentro se realizará en la sede de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (Fiesp). Esa entidad ha ejercido presión para que Argentina relaje su política comercial, aunque su titular, Paulo Skaf, en su última visita al país, llegó a decir que “al que quiero importar es al secretario Guillermo Moreno”. También participarán del encuentro la secretaría de Comercio Exterior, Beatriz Paglieri, y la de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Nahón.

“Esta misión constituye la mayor comitiva empresaria recibida por Brasil y se trata de una de las misiones comerciales de mayor magnitud que haya impulsado Argentina”, indicó Cancillería. El evento se extenderá durante toda la jornada de hoy. Está previsto que se realicen 2500 reuniones con cerca de 400 contrapartes brasileñas. Los empresarios argentinos, algunos de ellos dirigentes de distintas cámaras nucleadas en la Confederación General Empresaria (Cgera), viajarán en tres vuelos charter de Aerolíneas Argentinas. Estarán representados sectores como alimentos y bebidas, productos cosméticos y de limpieza, confecciones y calzados, maquinaria agrícola y de uso general, electrodomésticos y software.

Moreno considera que una nota de pedido de compra de un producto argentino equivale a un camión frenado en la frontera, explicó a empresarios. Así busca negociar el ingreso de bienes de Brasil a cambio de ventas a través de notas de pedidos. También intentará destrabar la situación de productos con dificultades para entrar a Brasil, como el caso de las naranjas. Durante la misión comercial habrá reuniones entre automotrices radicadas en Brasil y autopartistas argentinos y entre sectores de la industria naval y la exploración petrolera.