El endurecimiento de las restricciones para comprar dólares que aplicó la AFIP puso a la divisa estadounidense una vez más en el centro de la escena. El titular de la Unión Industrial Argentina, José Ignacio de Mendiguren, afirmó ayer que si la brecha entre el dólar oficial y el negro se mantiene o se amplía durante las próximas semanas impactará en el nivel de actividad. Desde el Gobierno dejaron trascender, en cambio, que el mercado negro no tiene relevancia en términos de volumen y que la cotización que allí se registre no va a afectar a la economía real. Incluso la presidenta Cristina Fernández de Kirchner dio a entender en su discurso del sábado por el aniversario de la Revolución de Mayo que quienes compren en ese mercado terminarán haciendo un mal negocio.

“No hay una crisis como las que ha tenido la Argentina, y es cierto, como dicen los economistas, que ese mercado (el informal) es muy pequeño, pero ante la abstinencia (que genera la compra de dólares en el mercado oficial) y con la historia argentina se crea un clima complicado cuando no debería ser así”, aseguró ayer De Mendiguren en declaraciones a Radio América.

Al ser consultado sobre si el Gobierno está evaluando alguna flexibilización del cepo cambiario, el empresario afirmó: “No tengo una información precisa, pero si tengo que arriesgar lo veo más en la postura de que es un mercado chico, no representativo y por lo tanto no interviene. Yo creo que hay que mantener un equilibrio porque cuando esto se instala después se complica, teniendo en cuenta nuestra historia”.

De Mendiguren, de buen diálogo con el Gobierno, recomendó tomar alguna medida lo antes posible para evitar que la brecha entre el dolar oficial y el negro se mantenga o se amplié. “Lo que creo es que hay que resolver esta situación lo antes posible. Si esto es un pico que después se normaliza es una cosa, pero si se va extendiendo en el tiempo, entonces la gente empieza a especular y aquel que tiene que comprar insumos se pregunta ‘¿a cuánto voy a reponer lo que tengo?, ¿va a estar en este valor o no?`. Entonces empiezan a convalidar o tener en cuenta ese tipo de cambio (el informal) para las operaciones de la economía real. Ahí entonces uno empieza a notar los perjuicios”, afirmó.

Si bien ningún funcionario lo explicitó, el Gobierno restringió las compras de dólares, para asegurarse las divisas necesarias para cumplir con todos los vencimientos de deuda de este año. Sin embargo, la restricción tuvo como efecto colateral la suba del dólar negro. La cotización del “blue” llegó a cotizar a 6,15 pesos la semana pasada, para finalmente retroceder a 5,93 pesos. La incógnita es si el oficialismo dejará que esa brecha se consolide o intervendrá de alguna manera.