El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer que William Daley había renunciado como jefe de Gabinete, pese a que se esperaba su continuidad en el Ejecutivo al menos hasta las elecciones generales que tendrán lugar en noviembre. Obama dijo que Daley, de 63 años y proveniente de Chicago (ciudad donde el presidente inició su carrera política), será reemplazado por el actual director de presupuestos del gobierno, Jacob Lew, de 56 años. “Lew cuenta con mi absoluta confianza”, señaló el mandatario, parado en un podio y escoltado por el jefe de Gabinete saliente y el recientemente nombrado, que no hicieron declaraciones a la prensa. “Su asesoramiento económico es invalorable”, agregó Obama sobre Lew. Este último trabajó previamente en el Departamento de Estado en Washington y había sido director de presupuestos durante la presidencia de Bill Clinton.

Obama reconoció que primero no quería aprobar el alejamiento de Daley, y que la semana pasada le rechazó la renuncia y le pidió que lo pensara mejor. Sin embargo, según contó el propio presidente, Daley se mantuvo firme al subrayar su deseo de estar más tiempo con su familia en Chicago. Desde su cargo, Daley estuvo estrechamente involucrado en las principales decisiones del año pasado, entre ellas la acción comando que se llevó a cabo en Pakistán contra el líder de Al Qaida, Osama bin Laden. Daley, apodado Bill, fue entre 1997 y 2000 secretario de Comercio, durante la presidencia de Bill Clinton, y después se desempeñó como directivo en el banco J.P. Morgan Chase. Entonces contribuyó, entre otras cosas, a la aprobación en el Congreso del controvertido Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Nafta). El jefe de Gabinete renunciante estuvo vinculado con cada una de las grandes decisiones que se han adoptado en el último año en la Casa Blanca, dijo Obama, desde el final de la guerra en Irak y el apoyo al pueblo libio, hasta la presentación del plan de empleo, pasando por la aprobación de los tratados de libre comercio con Corea del Sur, Panamá y Colombia.

“Nadie en mi administración tuvo que tomar decisiones importantes más rápidamente que Bill, y por eso creo que su decisión fue tan difícil para mí”, reconoció Obama al hacer el anuncio en la Casa Blanca. Se espera que el traspaso del cargo de Daley a Lew tenga lugar antes de fin de mes, dijeron funcionarios de la Casa Blanca. Como jefe de Gabinete –el cargo más parecido al de primer ministro en la administración norteamericana–, Daley sólo estuvo un año en ese puesto después de que Obama anunciara su nombramiento el 6 de enero de 2011 para reemplazar a Rahm Emanuel, que se convirtió después en alcalde de Chicago.

Había sido nombrado para restablecer las buenas relaciones entre la Casa Blanca y la comunidad empresarial tras una serie de roces en los primeros dos años de la administración Obama. Pero esos vínculos continuaron en un estado de frialdad. Según el diario El País, Daley carecía de la experiencia y los contactos en el Capitolio que le habían permitido forjar alianzas a Emanuel. En 2011, las divergencias con los republicanos en el Congreso dejaron al gobierno al borde de la suspensión de pagos en más de una ocasión.

Tal vez por eso Daley había insinuado en octubre, en una entrevista concedida sin el placet de la Casa Blanca, que se estaba planteando la posibilidad de su salida del gobierno, si bien dejó en claro que pensaba permanecer en su cargo hasta después de las elecciones de noviembre. A fines de 2011, la Casa Blanca anunció que las tareas de rutina del jefe de Gabinete pasarían a manos de otro alto funcionario, Peter Rouse, quien ya había desempeñado esa función, de modo interino, cuando se efectuó la renuncia de Emanuel y antes de que Daley asumiera su cargo.

La renuncia de Daley se hará efectiva a fines de este mes, una vez que Obama haya pronunciado su discurso sobre el Estado de la Unión. Eso le dará aire al mandatario demócrata, y al mismo Lew, para preparar la propuesta de presupuesto para el próximo año fiscal, que la Casa Blanca tiene previsto presentar ante el Congreso el 6 de febrero. Obama tendrá también que designar un nuevo responsable para la Oficina de Presupuesto y decidir cuáles serán las competencias de Rouse a partir de ahora. Daley, por su parte, se convertirá en uno de los copresidentes de la campaña electoral demócrata.