La presidenta Cristina Kirchner criticó ayer a los principales grupos mediáticos por “querer quedar bien con los de afuera y no con los de adentro” y sostuvo que “sería importante nacionalizar, no estatizar, los medios de comunicación (para) que adquieran conciencia nacional y defiendan los intereses del país”. En un discurso pronunciado durante un acto en Mercedes, la mandataria defendió las políticas encaradas por su gobierno frente a la crisis internacional y señaló que “hay que tenerles miedo a los gobiernos débiles” porque con ellos “los únicos que se beneficiaron fueron los intereses monopólicos”.

“Cuando por allí se pone tanto el micrófono y la cámara de televisión sobre los problemas del crecimiento, me acuerdo cómo los medios taparon e ignoraron aquellas políticas de entrega y subordinación y no dijeron ni una sola palabra ni sacaron una sola foto”, expresó la jefa de Estado al hablar en un acto en la fábrica textil Guilford. “A veces pienso si no sería también importante nacionalizar, no estatizar, que se entienda bien, los medios de comunicación, que adquieran conciencia nacional y defiendan los intereses del país”, agregó.

Fernández de Kirchner recordó que, en 2009, “cuando nos comprometimos a no perder un solo puesto de trabajo defendiendo la producción nacional, recibimos los ataques de los medios de comunicación y no de afuera” y destacó que un año después de aquellas medidas “todos los sectores de la producción están ganando como nunca en la Argentina”.

Pese a las críticas, la mandataria prometió que seguirá “apostando a una integración inteligente con el mundo, defendiendo los intereses de la Argentina” con medidas como el acuerdo “equilibrado” alcanzado entre el Estado y las principales compañías de telefonía en torno de las leyes antimonopolio. El Gobierno –dijo– no tiene “ningún prejuicio ni preconcepto con todos los que desde afuera vienen a invertir”.

En ese sentido, la Presidenta defendió el modelo económico “virtuoso” impulsado por el Ejecutivo y subrayó su permanencia más allá de los vaivenes económicos internacionales. “En 2008 seguimos adelante sin ningún viento de cola –sostuvo–. El mundo aconsejaba que te fueras a casa, que apagaras la luz y esperaras a que pase el chubasco, pero desde el Estado redoblamos los esfuerzos y la imaginación, ayudando a cada sector para que no nos echaran gente”, aseguró.

Por último, la Presidenta hizo referencia al acto por el Día de la Lealtad que encabezó el viernes pasado, en la cancha de River, junto a su esposo y titular del PJ, Néstor Kirchner, y al secretario general de la CGT, Hugo Moyano. “Es curioso, durante las primeras horas antes de ir al acto, algunos medios de comunicación estaban diciendo ‘están cortando, no se puede pasar, qué barbaridad’”, exclamó. La mandataria comparó el tratamiento mediático del acto con el que recibió el lockout agrario de 2008. “Cuatro meses nos cortaron las rutas y nadie decía nada, al contrario, lo impulsaban desde los medios. Y resulta que porque un viernes decidimos recordar el 17 de octubre por dos horas, por un problema de tránsito parecía que se venía el país abajo”, concluyó.

Acompañaron a Cristina Kirchner la ministra de Industria, Débora Giorgi, y el presidente de Guilford, Eduardo Bohm. También habló el intendente de Mercedes, Carlos Selva, quien se plegó al apoyo expresado ayer por los gobernadores oficialistas: “El futuro será Néstor o Cristina”, sostuvo.