Otra lluvia intensa volvió anoche a provocar trastornos en la ciudad de Buenos Aires y amenazó con poner en crisis, como había ocurrido un día antes, el sistema de desagües de la ciudad. Se paralizaron las líneas de subte C, D y H, y en la Avenida del Libertador el agua alcanzó los 30 centímetros de altura sobre el asfalto. Todo ocurrió cuando todavía se sentían las consecuencias del temporal del miércoles, especialmente en el barrio de Belgrano, donde otra vez los comerciantes fueron los principales damnificados. Como hace dos años, hubo negocios que pusieron en liquidación la mercadería arruinada por el agua. El gobierno porteño anunció que otorgará subsidios a los afectados, pero comerciantes de Belgrano reprochaban ayer que aún no habían cobrado los correspondientes a la inundación de febrero de 2010 o se quejaban porque habían recibido el subsidio un año después. A los reclamos de vecinos se sumaron las críticas a la gestión de Mauricio Macri que, tras más de cuatro años, aún no pudo superar este tipo de problemas.

Fuentes del gobierno porteño atribuyen los anegamientos al “gran caudal de agua que cayó en pocos minutos: 50 milímetros en 45 minutos, que coincidieron con la hora pico de tránsito”. “Esto produjo que los sumideros no pudieran escurrir de manera correcta, algo que se subsanó con la disminución de la intensidad de la lluvia”, dijo la fuente consultada por este diario.

No obstante, en la ciudad destacaron que no se inundó como en otras ocasiones la zona de Puente Pacífico, lo que indica el buen funcionamiento del desagüe en el nuevo tramo aliviador del arroyo Maldonado. No ocurrió lo mismo en las calles Blanco Encalada y Olazábal, donde “todavía se están llevando a cabo las obras del arroyo Vega”.

Vecinos de Palermo que pertenecen a la asociación Lago Pacífico desmintieron la información oficial al asegurar que hubo anegamientos en Santa Fe y Juan B. Justo, al punto de que el agua ingresó al túnel del subte, y advirtieron que, como suele ocurrir, “la calle Godoy Cruz volvió a ser otra vez el río Godoy Cruz”.

Las fuertes lluvias del miércoles y de ayer se originan en la presencia de “una masa de aire de características tropicales, de alta temperatura, a la que se suma una inestabilidad de la atmósfera, lo que provoca lluvias muy intensas pero de corta duración”, explicó a Página/12 el pronosticador de turno del Servicio Meteorológico Nacional, Juan Martín Del Oso (ver aparte).

“Es vergonzante que un jefe de Gobierno siga eludiendo las responsabilidades sobre un problema que lleva más de 20 años en la ciudad y continúe con promesas efectistas y demagógicas que quedan bajo el agua cada vez que llueve fuerte”, dijo ayer el presidente del bloque Buenos Aires para Todos, Fabio Basteiro.

Ayer el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, no hizo apariciones públicas e incluso suspendió una conferencia de prensa sobre prevención del dengue prevista para la mañana. En tanto, el ministro de Ambiente y Espacio Público, Diego Santilli, se encuentra de vacaciones en China con su familia.

Ayer, el titular de Defensa Civil, Daniel Russo, fue quien comandó los operativos de limpieza de sumideros y reparación de semáforos. “Cortamos el túnel de Salguero y Figueroa Alcorta como prevención, porque la gente igual se mete aunque esté inundado y después se quedan ahí”, informó.

Russo precisó que en Palermo las precipitaciones alcanzaron 48 milímetros en media hora, lo que provocó anegamientos en la avenida del Libertador a la altura de Coronel Díaz, Cerviño y Gelly y Obes. En Boedo se registraron 22 milímetros y en Villa Ortúzar, 4.

El funcionario advirtió que, pese a las advertencias oficiales sobre el alerta meteorológico, muchos vecinos sacaron las bolsas de basura que terminaron navegando sobre las calles inundadas.

Voceros de Metrovías confirmaron anoche que se había suspendido preventivamente el servicio en la línea C, mientras que en la D funcionaba un recorrido corto entre Plaza Italia y Congreso de Tucumán (por anegamientos en las estaciones Pueyrredón y Scalabrini Ortiz) y la H estuvo cortada durante una hora porque ingresó agua en las estaciones Once y Caseros.

El gobierno porteño informó que entregará subsidios los damnificados, que deberán iniciar el trámite en los Centros de Gestión y Participación Comunal (CGPC) y pueden informarse a través de la página web de la ciudad. Sin embargo, hasta anoche, en ese sitio no había información al respecto.

Los comerciantes afectados en Belgrano hicieron oír su voz de protesta. “Todavía no se dio una solución al problema de la limpieza rápida de los conductos, para que evacúen el agua, y se produce el anegamiento de los locales. Una cosa sencilla para evitar esto es cortar el tránsito. Así el agua escurre y no tenemos olas”, afirmó un comerciante. La comunera de Belgrano Julieta Costa Díaz (Proyecto Sur) recordó una frase que Macri pronunció tras una inundación, en 2008: “Podemos prometer que cuando terminemos esta gestión no vamos a volver a soportar esta tortura sistemática”.

“Le queremos informar a Macri que el primer mandato de su gestión concluyó y la bronca de los vecinos afectados sigue intacta porque su promesa sigue incumplida”, afirmó Costa Díaz.