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Por M. Fernández López
Pensar en lo nuestro
Se cumplen cincuenta años de El desarrollo de la América Latina y algunos de sus principales problemas, primer informe que Raúl Prebisch escribió para la ONU, donde intentó iniciar un pensamiento económico autónomo del elaborado en los grandes centros. Algunos de sus puntos salientes eran: 1) En materia económica, las ideologías suelen seguir con retraso a los acontecimientos, o bien sobrevivirles demasiado. El razonamiento acerca de las ventajas de la división internacional del trabajo es de una validez teórica inobjetable. Pero se basa sobre una premisa contradicha por los hechos. Según esta, el fruto del progreso técnico tiende a repartirse parejamente entre toda la colectividad, ya sea por baja de los precios o por el alza equivalente de los ingresos. Mediante el intercambio internacional los países de producción primaria obtienen su parte en aquel fruto. No necesitan, pues, industrializarse. 2) Las ventajas del proceso técnico se han concentrado principalmente en los centros industriales, sin traspasarse a los países que forman la periferia del sistema económico mundial... mientras los centros han retenido íntegramente el fruto del progreso técnico de su industria, los países de la periferia les han traspasado una parte del fruto de su propio progreso técnico. 3) La elevación del nivel de vida de las grandes masas depende, en última instancia, de una fuerte cantidad de capital por hombre empleado en la industria, los transportes y la producción primaria, y de la aptitud para manejarlo bien. 4) Cuanto más activo sea el comercio exterior de América latina, tanto mayores serán las posibilidades de aumentar la productividad de su trabajo, mediante la intensa formación de capitales. 5) Para formar el capital necesario a la industrialización y el progreso técnico de la agricultura, no parecería indispensable comprimir el progreso técnico de la agricultura, no parecería indispensable comprimir el consumo de la gran masa, que por lo general es demasiado bajo. Además del ahorro presente, inversiones extranjeras bien encaminadas podrían contribuir al aumento inmediato de la productividad por hombre. 6) Cuando se trata de importaciones y otras partidas a pagar en dólares, hay ya casos notorios de escasez de esta moneda... Es que el coeficiente de tales importaciones, con respecto al ingreso nacional de Estados Unidos, ha llegado a la exigua cifra del 3 por ciento al cabo de una baja persistente.
Es él
Débensele tres bretes: meter el laissez faire, vender trenes, crecer el depender de verdes. Debés creer en el laissez faire, te vende: leé Quesnay, Menger, Becker, Debreu, Schelle, Hecht, Heckscher, Spencer, Heller, Weber-Fechner, West, Stephen, Selden, Kemmerer, etc. ¡Laissez faire, je taime!. Déjese que se merque. Deléguense deberes. Cercénese el debe. Réstense mercedes. Estréchese el vejete. Desentenderse del que enferme. Heces en leche de pebetes. ¡Excelente! Se cree Pelé en el césped. Le mete en el Mercedes Benz: ¡le pertenece! Dele, jefe, decrétese regente, pretenden Méndez, Estévez, Pérez, Lestelle, el Derete. Querer es tener ¡Ser jeque tres veces! Festéjese. Celébrese Re-re. ¿Leyes? Me fregué en leyes. Que me den el flete, que le meteré rebenque. EL JEFE ES ÉL, ves en Telefé, leés en Petete. Él teje redes: Creedme, tenedme fe .. ¡Vencer! ¡Vencer! ¡Vencer!. El Frente, rebelde, en tren de defenderse, le repele. Exprésenle VETE, pretende. Despéguese de Re-re, que ennegrece el presente. Vétese ese pretender. ¿Crees en el laissez-faire? ¿Qué le ves? Es repelente. En éste, tener es ser. Respétense leyes, deberes, sed decentes. Déjese de verdes cheques. Réglese el desenfrene. Enderécese el tren. Dense leyes en vez de cheques. Empléese gente. Enséñese. Respétese vejez. ¿El nene? denle leche, té. Entréguese el excedente. ¿Qué leer? debés entender Sen, Lerner, Brems, Fellner, Veblen, Metzler, Phelps, Pedersen, Wells, etc. El jefe, dele que dele, cree ser el que vence: ¿Que el Frente, ese entrevere, se queje? ¿Qué pretenden? ¿detenerme? ¡Never! ¿me creen pelele? ¡Mequetrefes! ¡Me temen! ¿Entenderles? ¿ceder? ¡Que se peleen! ¡Meterles rebenque!. Que se merque en verdes. Expeler gente. Que se desequen vejetes. El que enseñe, el que enferme ... merd. De repente, ¿qué se desprende? Ver es creer ¿Que se ve en TV? ¿Qué se lee? Que el deber verdes crece, que el PB decrece. Me reprende el F.M. ¡Qué merengue! ¡Me requemé! ¿En qué erré? Meses que me resten ¿me pertenecen? Te deseé, Ye-ye. ¿Perderte? ¿Fenecer? ¡Heeelp!.
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