Algo me quedó rondando en la cabeza, algo que tiene que ver
con la muerte de Cris Miró. Porque no es lo mismo la noticia
para el público en general que para quien vive con vih. Hace
tiempo que nos acostumbramos a que las muertes se vayan espaciando y
cuando algún amigo se va lamento el lugar común
siempre encontramos alguna causa: o no se tomó el cóctel,
o tal vez empezó demasiado tarde o tal vez, tal vez. Que alguien
a quien vimos espectacular apenas un año atrás no haya
podido presentar batalla frente a una neumonía, asusta. Qué
sé yo, a lo mejor una pequeña aclaración, hablar
de los problemas que causa no seguir el tratamiento algo que todo
el mundo comentó off the record, no sólo traería
un poco de paz al mundo de fantasmas que cada tanto nos rondan sino
que, además, ayudaría a un montón de gente a tomar
la decisión de empezar el tratamiento. Yo entiendo el derecho
a la privacidad pero también creo que la exposición pública
implica cierta responsabilidad. Me acuerdo de los noticieros de esos
días con conductores de gesto adusto diciendo que Cris Miró
murió de una enfermedad como si no se pudiera nombrar
eso que padeció la artista. Pero bueno, como siempre,
la información para los que están infectados es prácticamente
nula, salvando la que se puede conseguir en los hospitales y fundaciones
una vez que uno o una asumió su diagnóstico y llegó
hasta ellos. Todas las campañas de prevención se dirigen
a quienes deben evitar contagiarse y se ignora a la gente que vive con
el virus y es la que en definitiva puede hacer más por cuidarse
y por cuidar al otro. ¿En qué campaña se habla
de la importancia de cumplir con el tratamiento? ¿En cuál
dice que los tratamientos discontinuados pueden generar cepas de virus
más resistentes a las nuevas drogas? ¿Cuántas campañas
se dirigen a las mujeres embarazadas, cuántas advierten sobre
las ventajas o no del testeo y el tratamiento para ellas? Es obvio que
si estas cosas no pasan, nadie va a pensar en cómo le cae a la
gente que está infectada una información que parece ligada
únicamente al mundo del espectáculo (en el caso de Cris).
De la misma manera cuando hay notas de salud es común que se
lancen bombas del tipo nacen niños sanos de padres infectados
(Clarín) sin importar los matices de esa información y
cómo le cae a alguien que está esperando un bebé
con la incertidumbre de no saber cuál será su estado inmunológico.
Si es verdad que el sida es un problema de todos, y la discriminación
está penada por la ley, creo que habría que empezar a
pensar de verdad en todos y no esto no es sólo una metáfora
llenarse la boca y seguir haciendo edificios llenos de escaleras que
sólo son para unos pocos.
MARTA DILLON