De todo sobre
Charly García
y su infalible
olfato mediático
La
cinta del capitán.
Es un brazalete rojo y lleva, sobre un circulo blanco, las iniciales del
concepto Say No More. A lo lejos, sugiere cierto parecido con otros brazaletes
y otras épocas ¿no? (SS y todo eso, en fin...) En un semana
se lo pusieron, orgullosos, el presidente Menem (¿o Nemen, o Never?),
Diego Maradona y Graciela Alfano. Esta sí que es Argentina.
El
pícaro del VHS. Ah... Está ahí, casi oculto,
como si se tratara de una imagen codificada, sólo para los que
quieran entender. En medio del des-concierto que propone el video de Sweet
home Buenos Aires, responsabilidad de García (vestimentas
coloniales, strip-tease caseros, titulares de Crónica, corte de
calles y demás), aparece una mujer. Está tomando sol en
una pileta y saluda a la cámara, detrás de sus anteojos
oscuros. Es Mónica, ex de Andrés Calamaro y ¿piedra?
de una guerra mediática que involucró a las dos stars. Una
puntada y con hilo.
lCarlos,
mi buen amigo.
El No preguntó a cinco músicos argentinos sobre la famosa
reunión García-Menem (¿o Nemen, o Never?). Aquí,
sus opiniones.
1) ¿Qué opinás de la reunión
de Charly García con Menem?
2) ¿Fue coherente que visite al presidente del indulto después
de subir al escenario a Hebe de Bonafini?
Nito
Mestre
1) Me pareció lo más normal del mundo. Es una invitación
del Presidente que, cualquiera que la reciba, la tiene que aceptar por
una cuestión de respeto. Sé de algunos músicos que
dicen yo no lo saludaría, pero no sé si alguno
de ellos le daría vuelta la cara frente a frente. Y en caso de
que lo hicieran... qué ¿serían rebeldes acaso?
2) Hebe de Bonafini no le da la espalda a Menem. Más de una vez
se lo encontró. Para reclamarle algo, necesariamente debe reunirse
con él. Y cuando está con él ¿qué va
a hacer?, ¿lo va a escupir?. Además, De la Rúa, Clinton,
Fidel Castro, Firmenich, también lo hicieron. El hecho de no hablar
uno con el otro me parece una chiquilinada. Es una rebeldía de
pibe de 15 años. Se puede estar de acuerdo o no con sus ideas,
pero eso no impide un diálogo o una reunión como la de Charly.
Diego
Frenkel (Bel Mondo)
1) Un asco. Me parece suficiente la respuesta ¿no?. Francamente
no entiendo en resultado de qué estado anímico Charly hace
estas cosas.
2) Obviamente contradictorio. Responde a su locura actual. Está
perdiendo totalmente ciertos criterios de valor.
Fabiana
Cantilo
1) Charly es mi amigo y punto. Nos respetamos. En todo caso si tengo algo
que decir, se lo digo a mis amigos. Pero no lo voy a publicar en ningún
lado. He cometido esos errores antes. Y me han dicho ¿qué
dijiste, boluda?. Mi amigo es Charly, no Menem.
2) Creo que es un juego. Seguro que dijeron, ¿qué
hacemos mañana?: vamos a comer un asado a Olivos ... y
bueno, vamos. Por supuesto que Charly no está apoyando la
tendencia política de Menem. De ninguna manera. No sé qué
habrá pasado por su cabeza, realmente. Particularmente veo que
en este país está todo podrido. Y parte del disparate es
esta reunión. Estamos en el país de Fellini.
Moris
1) Charly busca promoción, un poco de polémica. Es un especialista
en autobombo. Tal vez, también el Presidente lo haga en busca depromoción.
Pero también puede que hayan hablado sobre la vida, la muerte o
el más allá. No está mal.
2) No me parece que sea incoherente. Si el Presidente invitara a Hebe
de Bonafini, ella también iría. Y si me invitara a mí,
pasaría lo mismo. Creo que el mundo necesita del diálogo,
de la búsqueda de acuerdos.
Fernando Ruiz Díaz (Catupecu Machu)
1) Con esta reunión, Charly demostró que es capaz de todo.
¿No había dicho una vez que si ganaba Menem se iba del país?
2) Charly hizo un culto de las controversias y las contradicciones. Y
esta reunión es otra prueba. Lo que no sé es en qué
plan visitó a Menem. Cuando vi la tapa del diario, me desagradó
mucho. No entiendo si fue un guiño para algo, o qué. Del
lado de Menem está mucho más claro: lo invitó para
ganar popularidad, como hizo con los Stones.
Encuesta:
Cristian Vitale
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