Los nuevos Brujos
Hasta ahora sólo había noticias del guitarrista Fabio Rey, antes en San Martín Vampire y actualmente en Adicta. Pues bien, el bajista y uno de los cantantes de aquella formación (Metal Lee-Chi y Mala-Yi, respectivamente) se reunieron y crearon Biónica, un quinteto que hereda de Los Brujos el gusto por la distorsión, los efectos electrónicos retro-futuristas y títulos como “Conectoide”, una canción que habla de un tipo que está todo el día online. “Tratamos de trabajar como samplers humanos”, le dijo al No el ahora bautizado Metal Macumba (popularmente conocido como Lee-Chi), que en Biónica toca la guitarra. “Tocar automatizados, emulando a una máquina, pero con tracción a sangre”. Según él, Biónica tiene “la esencia” de Los Brujos. “Eso es ineludible”, explica, “pero trabajamos como para llevar a Los Brujos diez años para adelante. Eso tuvo que terminar por desgaste musical y personal”.
La banda ya tiene listo su primer disco –seguramente se titulará Biónica–, tendrá entre nueve y doce temas, y estará en la calle en octubre. “El despliegue escénico en vivo no tiene que ver mucho con Los Brujos: es más robotizado, frío y también agresivo”, sigue el guitarrista. “Es electrónico, pero no tiene que ver con el pop electrónico, tal vez sí más con lo industrial. Las letras hablan puramente de tecnología, comunicación y el surgimiento de la nueva era. La idea base está en Kraftwerk, no nos interesa Korn”.
P.P.
Biónica se estrena el sábado a la medianoche en El Observatorio (Urquiza 124), con El Matadero y Simio como bandas invitadas.

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King Diamond insiste
No hay pruebas
Mercyful Fate es una banda pionera del heavy metal, y ampliamente responsable del black metal, es decir, ese estilo que se caracteriza por entonarle canciones al demonio o algo así. Y hacen escuela. Por ejemplo, en el último disco de Metallica, Garage Inc, la banda ejecuta nada menos que 5 canciones de Mercyful Fate: “Evil”, “Curse of the pharaons”, “Satan’s Fall”, “A Corpse Without a soul” e “Into the Coven”. Al señor King Diamond, el mítico líder de la banda, satanista confeso y miembro de la Iglesia de Satán de Antón La Vey (y hombre conversador y sumamente agradable, en contra de todo lo que puede suponerse) le encanta que las bandas más nuevas le rindan homenaje. “Estuvimos de gira dos meses con Metallica por Europa”, le contó al No vía telefónica, “y tocamos con ellos. Es un honor, y los covers me encantaron”. Diamond es sacerdote de la Iglesia de Satán... igual que Marilyn Manson. ¿Cree que su colega es un buen vocero de institución? Bueno, no tiene mucha idea. “La verdad es que no tengo una opinión formada de Marilyn porque apenas lo escuché. No sé de qué habla en sus letras. Así, a primera vista, me parece que está bien. Pero nunca le presté mucha atención. Hay otras bandas nuevas de las que sí compro discos, como Type O Negative, que me encanta”. ¿Y está harto de explicar que los satanistas no matan bebés ni hacen misas negras? Sí, claro. “La gente tiene prejuicios sobre el satanismo”, se entusiasma. “No entiende lo que es, no sabe, y no se molestan en leer la Biblia de Satán que lo explica todo. El satanismo no es una religión. Lo espiritual está en cada uno, no puede ser algo establecido. Es decir: no hay pruebas de que exista Dios. Hay fe, está bien, pero no hay pruebas. Entonces yo, como individuo, decido apartarme de las religiones establecidas y creer en mí mismo, en los demás, en las individualidades. Y eso es el satanismo: resaltar al individuo como algo único, y respetarlo. Es razonable y lógico como filosofía. Se trata de tener la mente abierta. Tengo amigos que creen en Jesús que son muy buena gente: el satanismo se trata de eso. No somos todos iguales. No podemos serlo, y eso está bien, y no tenemos por qué creer todos en lo mismo. Y todos sabemos que la religión es algo malo, por eso el satanismo es más humano: si mirás al mundo, la mayoría de las guerras son por religión. Irlanda del Norte, la ex Yugoslavia, Medio Oriente, todo. Y el satanismo también es aceptar la parte oscura de nosotros. La bondad no es absoluta... ¿Cómo sabríamos que tenemos un día bueno si no tenemos uno malo? Ser humano es esa dicotomía de bien y mal”.
M.E.
Mercyful Fate toca el sábado en Cemento, a las 22.
Las bandas locales invitadas serán Fastidio, Sauron,
Humanimal y Dagas. No lleven cruces invertidas.