Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Las 12

ECONOMíA EN PAGINA/12 WEB
20 FEB 2000






FINANZAS del Buen Inversor
 por Claudio Zlotnik

SE VIENE EL 5to AJUSTE CONSECUTIVO EN LA TASA DE INTERES AMERICANA
Fantasmas
en la city

La nueva suba en la tasa de interés que dispondrá la Reserva Federal en marzo
alimenta los temores entre los financistas.

Alan Greenspan ya lo advirtió, y de una manera nada sutil. La Reserva Federal (banca central estadounidense), organismo que él preside, volverá a elevar la tasa de interés de corto plazo a mediados de marzo. Será el quinto ajuste consecutivo en nueve meses para prevenir un rebrote inflacionario en los Estados Unidos. Por ahora, la economía estadounidense se resiste a perder fuerza a pesar de las continuas subas en el costo del dinero. Sin embargo, un fantasma recorre la city. ¿Qué sucederá en caso de que, efectivamente, la economía de los Estados Unidos se enfríe? ¿Wall Street podría dejar de ser el reaseguro de la tranquilidad en el mercado financiero mundial? ¿Qué pasaría con la Argentina si hay un fuerte ajuste en la Bolsa estadounidense?
El estado de cosas en la actualidad es el siguiente: Estados Unidos transcurre su 108º mes consecutivo de crecimiento económico, un record histórico absoluto. Hasta ahora, la inflación no ha sido más que un fantasma que azuza a los financistas y al propio Greenspan. Es el mal más temido, potenciado por el imparable aumento del petróleo.
Mientras tanto, las familias estadounidenses siguen endeudándose para hacer rendir sus ahorros en la Bolsa. En los últimos cinco meses, los préstamos bancarios para financiar inversiones en acciones crecieron nada menos que un 40 por ciento, haciendo trepar al stock hasta los 243.000 millones de dólares, un monto semejante a lo que la Argentina produce anualmente. El dato es inquietante. Pregunta: ¿qué sucedería si se diera una corrección importante en Wall Street? Respuesta: en medio del pánico y obligados a cubrir sus deudas, los pequeños inversores se lanzarían a vender sus tenencias provocando una aceleración en la caída de los papeles.
La posibilidad de un fuerte ajuste en la Bolsa neoyorquina no escapa a la atención de los financistas. Justamente, las continuas subas de la tasa impulsadas por Greenspan no hacen más que realimentar ese temor. En efecto, el mayor costo del dinero terminará por enfriar la economía con el consiguiente descenso del consumo y de las ganancias de las compañías. En ese marco, ¿seguiría siendo rentable apostar en papeles empresarios, o más bien los inversores terminarán huyendo hacia un refugio seguro?
Estas incógnitas no sólo desvelan a los ahorristas y administradores de fondos estadounidenses. La inquietud ya está instalada en la city porteña. Cada vez que Greenspan decide un alza de la tasa de interés, la Argentina debe hacer frente a un financiamiento más caro. Y la sombra de un bajón en Wall Street enciende las luces de alarma entre los financistas, ante la posibilidad cierta de que un eventual sacudón se contagie a Buenos Aires y al resto de los recintos de la región. Y seque el mercado de capitales internacional, lo que haría subir las tasas de interés por las nubes.
Por ahora, los ajustes de Greenspan no trajeron mayores consecuencias. Pero los inversores no le pierden pisada al banquero. De sus decisiones también depende la suerte que termine corriendo la economía argentina.

arriba