Todo lo que hay que saber de Amnesiac, el nuevo disco de Radiohead

NSe supo casi inmediatamente después de la aparición del intrigante Kid A: había otro disco grabado, con menos juego experimental y con cierto aire guitarrero, tal vez lo añorado por una creciente masa de fans en todo el mundo. Ese disco aparecerá el 4 de junio y la principal curiosidad a su alrededor está planteada porque se trata de una banda top que se da el lujo de editar ¡dos discos en menos de un año! Ciertamente, un gesto de irreverencia hacia el negocio discográfico, de parte de estos nuevos héroes de la intelectualidad británica.

POR MARIANA ENRIQUEZ

Amnesiac es el quinto disco en la corta pero productiva carrera de Radiohead, con fecha de edición prevista para el 4 de junio. Aquí, para empezar a degustarlo, el No te anticipa una radiografía canción x canción que ayude a descubrir el sucesor de Kid A, publicada en el sitio de Internet del semanario New Musical Express. El punto central alrededor de Amnesiac es que se trata de un disco más “comercial” y por ello debe entenderse que posee canciones (ahora sí, canciones) que semejan en estructura melódica y arreglos a las del –hasta el momento– insuperable OK Computer. En el orden en que figuran en el álbum, ésta es la primera manera de acercarse al disco del que todos hablarán en un par de meses.

1 “Packt Like Sardines in a Crushd Tin Box” De la misma manera en que el primer tema de Kid A, “Everything in its Right Place”, no daba una idea clara acerca del resto del álbum, este tema es igualmente obtuso. Construido alrededor de un sample de batería y una guitarra, sonidos extraterrestres dominan la canción.
Letra: “Soy un hombre razonable/ salí de mi caso”.
Puntos de referencia: “Everything in its Right Place” (Kid A).

2“Pyramid Song” Obvio single. Es una de las canciones de Amnesiac que fueron tocadas en vivo el año pasado. Construida alrededor de un simple y lindo riff de dos acordes de piano, la canción crece lentamente hasta que llega al clímax en un arreglo de cuerdas lujurioso que indica por qué quisieron titularla en un principio como “Egyptian Song”.
Letra: “Salté al río, ¿y qué vi?/ Angeles de ojos negros nadaban junto a mí”.
Puntos de referencia: “No Surprises”, “Exit Music (For a Film)” (OK Computer).

3“Pull/Pulk Revolving Doors” Canción sorprendente, aun comparándola con la experimentación que caracterizó partes de Kid A. Es un tema dance sucio y distorsionado que se parece más a Boards of Canada que al Radiohead tradicional. De construcción clínica, la canción es instrumental excepto por unas voces fragmentadas y computadorizadas.
Letra: “Hay puertas que se abren solas... puertas vaivén, puertas secretas”.
Puntos de referencia: “Idioteque” (Kid A).

4“You and Whose Army?” También fue tocada en vivo en la gira de Kid A y fue inicialmente interpretada como una crítica al gobierno laborista de Tony Blair. La versión de estudio, que puede conseguirse en Napster desde hace unos cuantos meses, dura sólo 3 minutos y es la primera canción en la que se distingue una guitarra. La voz de Thom está comprimida y tiene una onda años ‘40.
Letra: “Vení si pensás que podés convencernos/ ¿Vos y el ejército de quién?”.
Puntos de referencia: “Karma Police” (OK Computer).

5“I Might Be Wrong” Posiblemente sea el tercer single, y es la primera decepción. Construida alrededor de un riff de guitarra con aires bluseros similar a “Electioneering” (OK Computer), la versión de estudio no captura el dinamismo de sus versiones en vivo, y falla.
Letra: “Vayamos a la catarata/ pensá acerca de los buenos tiempos/ nunca mires atrás”.
Puntos de referencia: “Electioneering” OK Computer, “In Limbo”, Kid A.

6“Knives Out” Una canción pop de tres minutos, shockeante, la más comercial que han grabado desde The Bends, y el segundo single de este disco. La guitarra de Johnny Greenwood busca inspiración en The Smiths y REM, mientras Yorke redescubre su sed de melodía. Líricamente es más deprimente que nunca,pero los solos de guitarra acústica y la ausencia de batería le darán a la banda su single más exitoso desde “Paranoid Android”.
Letra: “Quiero que sepas/ que no voy a volver”.
Puntos de referencia: “Street Spirit (Fade Out)” (The Bends) y “Paranoid Android” (OK Computer).

7“The Morning Bell Amnesiac” Según Thom Yorke, esta nueva versión del tema de Kid A suena como “Tales of the Unexpected” y tiene algo de razón. Las estructuras rítmicas complejas han desaparecido y son reemplazadas por vibráfonos y guitarras acústicas. Parece una canción de cuna inquietante.
Letra: “Cortá a los chicos por la mitad/ liberame”.

8“Dollars and Cents” Con un ambiente claustrofóbico al estilo “The National Anthem”, la mezcla final de este tema está caracterizada con arreglos de cuerdas que imitan la armonía vocal. Salvo por ciertos trucos de estudio, se parece bastante a la versión en vivo.
Letra: “Somos los dólares y los centavos/ las libras y los chelines”.
Puntos de referencia: “Optimistic” y “The National Anthem” (Kid A).

9“Hunting Bears” Un breve interludio instrumental podría estar incluido de Music for Films, de Brian Eno. Sólo un frágil solo de guitarra, acompañado por un órgano mínimo.
Letra: no tiene.
Puntos de referencia: “Treefingers” (Kid A).

10“Like Spinning Plates” Lo más vanguardista que Radiohead haya hecho hasta el momento. La voz, estrecha y a veces pasada al revés, está acompañada por arreglos de cuerdas cinemáticos y samples revertidos.
Letra: “Se siente como platos que giran/ estoy viviendo en la brumosa tierra del cucú”.
Puntos de referencia: “Climbing Up the Walls” (OK Computer).

11“Life in a Glass House” Radiohead hace lounge. Asistidos por el jazzero veterano Humphery Lyttleton, la canción es el sonido de Yorke yendo a Nueva Orleans y ensuciando la voz. Un buen final para el disco.
Letra: “Por supuesto que me gustaría sentarme a charlar/ por supuesto que me gustaría quedarme a masticar la grasa”.
Puntos de referencia: “The National Anthem” por los vientos y “The Tourist” por el sentimiento.

No , vienen por ahora

Lamentablemente, según un mensaje que dejó Johnny Greenwood en el message board oficial de Radiohead la semana pasada, la banda no visitará próximamente Sudamérica. Sin embargo, hay esperanzas. “No hay nada planeado por ahora”, escribió Greenwood. “Pero siempre hablamos de ir, tenemos ganas... Y lo cierto es que tampoco planeamos tanto.” Hay más noticias. El primer single de Amnesiac, “Pyramid Song”, se editará el 21 de mayo en Inglaterra. Para esa canción se grabaron dos videos distintos, uno dirigido por Chris Bran y los Vapour Brothers (no será emitido por MTV) y el otro por Shynola (y este sí se verá en la cadena estadounidense). Los lados B de “Pyramid Song” serán cuatro canciones nuevas: “Transatlantic Drawl”, “Fast Track”, “Kinetic” y “Orgy”. Mientras tanto, eligieron una canción diferente como primer single para Estados Unidos: será “I Might Be Wrong” y se editará el 1º de mayo. Para finalizar, las sociales: Thom Yorke fue papá el 6 de febrero. El y su novia Rachel bautizaron Noah al niño, y están muy felices.

Mr. Lyttleton y el chico raro

El año pasado estaban inmersos en las penosas sesiones de grabación de Kid A. Una de las canciones los tenía particularmente trabados: “Living in a Glass House”, que quedó finalmente fuera de ese disco y que finalmente aparecerá en Amnesiac. Al guitarrista Johnny Greenwood le pareció que la única persona que podría ayudarlos a resolver el arreglo del tema era Humphrey Lyttleton, un trompetista de jazz de setenta años y enorme prestigio. El hombre, desde hace 20 años, toca en el pub Bull’s Head y fue el líder del movimiento de jazz inglés de los ‘50. Greenwood le escribió una carta a Lyttleton que decía: “Es una vergüenza pedir esto y sé que usted probablemente está muy ocupado, pero estamos en problemas”.
Predeciblemente, el veterano jazzero ni siquiera conocía a Radiohead. Pero después de pedirle OK Computer a su hija, y tras un breve encuentro con Greenwood, accedió a unirse a la banda en el estudio de Bayswater. Y la pasó bien con los “jovencitos”. “La gente me decía que los chicos estaban todos locos, pero pasamos un buen momento. Igual, costó un poco ponernos de acuerdo. ¡Nadie sabía lo que yo iba a hacer! No querían que sonara como algo muy producido en el estudio sino que fuera una cosa exploratoria, una especie de improvisación entre gente que no había planeado nada de antemano. Detecté que ponían los ojos en blanco cuando empezamos la sesión, como si fuera notable que pertenecemos a mundos totalmente diferentes. Creo que sufrieron varias crisis nerviosas en el proceso, porque les costaba hacerme entender qué querían exactamente.”
Finalmente, el tema se completó. Según Lyttleton, “quedó bastante salvaje. Empiezo tocando en tonos menores, y después se vuelve salvaje y primitivo, como un blues de Nueva Orleans”. La sesión duró siete horas, y dejó al anciano exhausto. “Cuando finalmente logramos una toma que les gustó, me dijeron: ‘Buenísimo, ahora vamos a comer algo y después seguimos tocando’. Y les tuve que decir: ‘No, muchachos, este fue un día muy bravo para mí’.” Lo más raro de todo, para Lyttleton, fue la actitud de Yorke, a quien llama cariñosamente Thom. “Cuando Thom cantaba, desaparecía de nuestra vista. Se sentaba con las piernas cruzadas en una especie de pose meditativa en un rincón de la cabina. Es un chico raro.”

SuperThom contra
los bufones canosos

El introvertido e intenso Thom Yorke no parece, a primera vista, un hombre que siquiera lea los diarios, o que se interese por la vida fuera de su mundo interior. Pero, sobre todo en el último año, el delicado líder de Radiohead se ha revelado como un opinator-activista de las más diversas causas. Además de lanzar un abierto ataque el primer ministro británico, Tony Blair. En el booklet de Kid A, por ejemplo, aparece una sarcástica dedicatoria a Leo, el hijo por entonces recién nacido de Blair, y una caricatura del primer ministro. Y muchas canciones nuevas, que quedaron fuera de ese disco, tienen referencias directas al premier inglés. “Follow me Around”, por ejemplo, dice: “¿Nos mentiste, Tony?/ Creímos que eras diferente/ Ahora no estamos tan seguros”. Thom tiene además una página personal en el sitio oficial de Radiohead (radiohead.com) y hace poco dejó allí un mensaje oculto –había que pintar la pantalla para verlo– que decía: “Me parece que ya me merezco una ficha en los archivos del MI5, ¿o no, Tony?”. El MI5 es el servicio de investigaciones secretas británico. Sucede que Thom Yorke está involucrado junto a Bono y otros artistas en la campaña Drop the Debt, impulsada por la organización Jubilee 2000, que solicita a los grandes bancos y países desarrollados que anulen la deuda externa de las naciones más pobres del mundo. En diciembre del año pasado, el canciller británico Gordon Brown le anunció a Jubilee que el Reino Unido efectivamente había cancelado la deuda de 40 naciones del tercer mundo (incluyendo a Camerún, Tanzania y Mozambique), pero Thom se negó a creer en las buenas intenciones de esta decisión y declaró que “ahora parece que el G7 canceló la deuda, cosa que está bien, y Gordon Brown es maravilloso... Todo muy lindo, pero esos países van a terminar pagando más que antes. ¿Por qué? Porque los bufones canosos del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional insisten en que las deudas que ellos mantienen tienen que ser pagadas sí o sí. Entonces, que los países industrializados cancelen las deudas no sirve de nada. Es muy complicado y tenés que ser un economista para entender lo que significa toda esta mierda. Para mí, el FMI y el Banco Mundial pretender esconder la voluntad de sus principales socios, es decir, el Grupo de los 7. Lo que el G7 quiere es mantener las deudas por razones políticas y económicas, y mantener las tarifas de intercambio en contra de estos países, de modo que no puedan desarrollarse de ninguna otra manera más que las que estipule Occidente. Sigue siendo un crimen en contra de la humanidad”.
Igualmente, Thom reconoce que su conocimiento de los asuntos mundiales es relativamente reciente. Y confesó que fueron sus experiencias personales las que lo llevaron a concientizarse acerca de la pobreza mundial. “Pasé los primeros años con Radiohead sin darme cuenta de asuntos como éste”, dijo en un chat de Jubilee 2000. “Tenía anteojeras. Pero gracias a las giras empecé a darme cuenta de que el maravilloso Occidente no era tan maravilloso: nuestros viajes a México y Tailandia lo hicieron bastante obvio. Sentí que todo el mundo quiere volverse occidental, pero sólo porque Occidente destruyó sus culturas, y están a su merced.”