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Se avecina una oleada de “gaudimanía”. El 25 de junio de este año se cumplirá el 150º aniversario del nacimiento de Antonio Gaudí, uno de los arquitectos más inclasificables de la historia del pasado siglo, y no será desaprovechada esta oportunidad cronológica para revisar una figura que cada vez despierta mayor interés internacional. Veintiún exposiciones en Barcelona, otras diez en el pequeño poblado de Reus, múltiples actividades en León y Astorga y otros actos en Comillas, Madrid y decenas de poblaciones catalanas configuran un programa con más de un centenar de propuestas que abarcan desde fiestas populares a congresos científicos.
El Año Gaudí se iniciará el 17 de enero, cuando se reúna el consejo promotor de esta celebración, integrado por 140 entidades, instituciones y empresas. La inauguración formal, sin embargo, se producirá el 20 de marzo, con un acto oficial que presidirá la reina Sofía y en el que están previstas las intervenciones de arquitectos como Frank O. Gehry, Norman Foster, Jean Nouvel, Arata Isozaki y Oriol Bohigas, todos ellos admiradores de la obra de un arquitecto que se adelantó tanto a su tiempo que resulta difícil de entender cómo consiguió clientes para unas construcciones tan delirantes, incluso hoy en día, como La Pedrera, el Palau Güell o la catedral conocida como La Sagrada Familia.
“En todas las obras de Gaudí, pasaba que no gustando nunca a nadie, tampoco había nadie que se atreviera a decírselo a la cara, porque tenía un estilo que se imponía sin gustar”, explica Francesc Pujols, escritor catalán que fue de los primeros en publicar un libro elogioso sobre Gaudí en 1927, un año después de su muerte, cuando el clasicismo académico de la época abominaba del barroquismo gaudiniano. La situación cambió mucho desde entonces y ahora Gaudí es no sólo el principal gancho turístico de Barcelona sino que, además, resulta aclamado por su genio artístico, su papel precursor en la invención de nuevas formas constructivas y, por algunos, como santo, ya que sigue abierto su proceso de beatificación.
El Año Gaudí es un evento promovido por el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat de Cataluña y el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte que, en conjunto, destinan cerca de dos millones de dólares a la coordinación, organización y difusión de este evento. Para su coordinador técnico, Daniel Giralt-Miracle, esta celebración debe contribuir a borrar la imagen superficial y de postal que se suele tener del arquitecto y profundizar en sus verdaderos logros artísticos. Esta es una celebración que no para de crecer en número de actividades y que, de hecho, ya comenzó el año pasado con la publicación de varias biografías sobre el arquitecto y de otros libros divulgativos sobre su trayectoria. Incluso las exposiciones ya han comenzado. La primera del programa oficial se inauguró el pasado 20 de diciembre en el Instituto Cervantes de Roma. Antoni Gaudí: una visione poliedrica, que viajará luego a Milán, Tel Aviv y Munich, reúne el trabajo que siete fotógrafos (Toni Catany, Manel Esclusa, Marc Llimargas, Leopold Pomés, Manel Armengol, Humberto Rivas y Rafael Vargas) realizaron a partir de la obra de Gaudí. También comenzaron ya las exposiciones en Reus, la ciudad catalana que se disputa con el pueblo vecino de Riudoms, el honor de haber sido la cuna del arquitecto. En esta población, donde se organizarán unas 40 actividades alrededor de las realizaciones y la vida de su hijo ilustre, se presenta hasta finales de enero una exposición fotográfica que luego será presentada en Palma de Mallorca, Valencia, Lleida y Madrid.
Con todo, las exposiciones centrales de la celebración se inaugurarán entre marzo y setiembre. Gaudí. Experiencias. Espacio, geometría, estructura y construcción será una de las que, a priori, se presentan como más interesantes ya que se intentarán explicar las innovaciones constructivas y las originales soluciones geométricas que formuló Gaudí para la realización de sus edificios y que ahora, con las nuevastecnologías, ahora se demuestran más racionales y factibles de concretar de lo que pudo pensarse en su día. La relación de Gaudí con su entorno cultural y artístico, así como la desigual recepción de su estética entre los diferentes movimientos de este siglo, será tema central de Gaudí. Entornos. Esta exposición, junto a la que presentará la Fundació Caixa Cataluña en su sede de La Pedrera, sobre el Gaudí diseñador que apostaba por la integración de todas las artes, serán la base de la megaexposición que se presentará entre octubre y diciembre en el Museo Reina Sofía de Madrid. Por su parte, las fundaciones Miró y Dalí presentarán exposiciones sobre la influencia de Gaudí en la obra de estos artistas, y el Museo Picasso se sumará con la exposición París-Barcelona.