San Antonio Spurs se metió en la final de la Conferencia Oeste al vencer 91-82 a New Orleans, como visitante, y ahora se medirá desde mañana con Los Angeles. Emanuel Ginóbili fue el goleador del partido con 26 puntos y sentenció el resultado con los tiros libres. Fabricio Oberto terminó con cuatro puntos y nueve rebotes.

San Antonio llegaba al partido con el problema de tener que definir su continuidad fuera de casa, donde había perdido los tres juegos anteriores por 19 puntos de promedio. Por eso, para cambiar esa historia, la estrategia de Popovich fue darle protagonismo en el arranque a Ginóbili, que esta vez no arrancó bien con el aro, convirtiendo apenas uno de sus seis primeros intentos. Sólo la buena producción defensiva de los Spurs permitió que New Orleans no se despegara en el marcador cuando promediaba el primer cuarto. Y como Duncan lastimaba adentro, en cuanto los Hornets se salieron de libreto, los visitantes pudieron pasar al frente para cerrar el parcial inicial con la ventaja: 23-20.

A esa altura, el partido era bastante enredado, con muchas pérdidas de ambos bandos y un juego muy desordenado. Sin embargo, en ese trámite enmarañado, San Antonio encontró los triples seguidos de Horry, Udoka y Bowen para tomar un ventaja de diez puntos cuando promediaba el segundo cuarto. Por New Orleans sólo daban la cara David West en el goleo y Chris Paul con asistencias y robos. Pero la aparición en escena del serbio Stojakovic con sus lanzamientos desde el perímetro sirvió para que los locales dieran vuelta el resultado en tres minutos (37-36).

Entonces, a 3:37 del final del tiempo inicial, y tras un juego apagado hasta ahí, llegó el momento Ginóbili: Con tres triples casi consecutivos, más una bandeja volada, el argentino levantó a su equipo y le devolvió la ventaja para cerrar el parcial 51-42. Había que ver si los Spurs podían sostenerla o caían en un bache como les había pasado en los otros encuentros en New Orleans. Y esta vez, la premisa fue jugar lento, darle la pelota a Duncan y aguantar bien en defensa, para que los Hornets no pudieran correr en el contragolpe.

Y la estrategia salió perfecta. Los Hornets no pudieron imponer su ritmo, se frustraron y tomaron malos tiros, para que San Antonio, con su libreto y el pase extra de siempre, lograra sacar una diferencia de 15 puntos para el segmento final (71-56). Sin embargo, el equipo de Byron Scott tiró el resto y llegó a ponerse a tres puntos de la mano de Pargo. Pero los libres de Ginóbili sentenciaron el juego.