Tigre no aguantó. Sobre el final del partido Rubén Ramírez le dio el empate agónico a Colón, y de esta manera el conjunto dirigido por Diego Cagna dejó pasar una gran chance de escaparse lejos de los punteros. Ahora sólo les lleva un punto de ventaja, de forma transitoria, a Boca y San Lorenzo, que hoy tienen que jugar sus partidos. Así, los de Victoria sumaron su segundo encuentro consecutivo sin ganar, mientras que los santafesinos hace cuatro que no pierden.

Muy complicado se le presentó el encuentro a Tigre desde el inicio. Es que Colón salió decidido a presionarlo y no lo dejó jugar. Así, el local se hizo del control de la pelota, a partir del buen manejo de Capurro y Alfredo Ramírez, y aprovechando los espacios que le daba su rival en la mitad de la cancha comenzó a ser claro dominador de la situación.

Tantas facilidades tuvo Colón para llegar al arco de Islas, que tras un robo de Acosta en su propio campo se inició el contragolpe que terminaría en una corrida tremenda de Fuertes, a quien el arquero Islas apenas lo tocó y Beligoy cobró penal. El delantero no titubeó: pateó fuerte, potente, al medio del arco, y puso el 1-0 para que su equipo justificara lo que había hecho hasta ese momento. Pero pese a ser un golpe anímico tranquilizador para el local, el gol despertó a Tigre.

Porque el conjunto dirigido por Cagna, que hasta ahí no había hecho mucho, se despabiló y enseguida tuvo una chance de gol. Altobelli ganó por su potencia, tiró el centro atrás y Giménez, con todo el tiempo a su disposición, mandó la pelota por arriba del travesaño. Colón se había retrasado y el visitante aprovechó. A través del empuje de Rosano y del buen manejo de Castaño le generó varios problemas a su rival. Así, de tanto buscar, el visitante llegó a la igualdad. Sin embargo no se quedó y fue por más. En los últimos 10 minutos de esa primera mitad, fue todo de Tigre. Altobelli estaba imparable y Morel, en dos oportunidades. casi pone en ventaja a su equipo. Sin embargo, tras el entretiempo el partido se emparejó, porque los dos equipos salieron en busca de la victoria, aunque sin mucha claridad.

El desarrollo se hizo intenso. De ida y vuelta. Y pese a la expulsión de Aguilar, Colón no se desestabilizó, y tuvo las mejores chances de llegar al gol. Pero el que dio el primer golpe fue Tigre. Porque a diez minutos del final, un cabezazo de Morel les devolvió las esperanzas a los de Victoria, que con ese resultado volvían a asegurarse la punta por una semana más. Pero la felicidad duró poco. Porque ese duro golpe que había dado Tigre no había sido de nocaut. Colón se levantó, y con las últimas fuerzas que le quedaban fue en busca del empate. Y lo encontró con un toque de Ramírez tras un corner. Así le arrebató el triunfo a su rival, que perdió una gran chance de escaparse por mucho más.