DEPORTES
› LA DIRECTIVA DE ROSARIO CENTRAL DESPIDIO AL FLACO
Chau Menotti: se viene Russo
Por Alejo Diz
Desde Rosario
A pedido del presidente Víctor Vesco, la Comisión Directiva de Rosario Central decidió despedir como entrenador a César Luis Menotti. La determinación política se tomó luego de que el Flaco rechazara la posibilidad de negociar su desvinculación tras nueve partidos sin poder ganar. El presente deportivo de los rosarinos es de extrema gravedad –están en zona de descenso– y por esto, antes de conversar con Miguel Angel Russo, quien seguramente será el sucesor de Menotti, tres dirigentes se reunieron con Julio Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino, para “conocer sus sugerencias”.
Al mediodía de ayer los principales dirigentes de Central viajaron a Buenos Aires para “negociar la desvinculación de Menotti”. Pero a su encuentro con el Flaco en su quinta de Ingeniero Maschwitz los dirigentes –viajaron los vicepresidentes Juan Carlos Campagna y Ricardo Ferguson junto al tesorero Jorge Sauan y el secretario Néstor Mascó– se encontraron con la negativa del técnico para apartarse de la dirección técnica de Central, actitud que dejó “desorientados” a los conductores institucionales. El entrenador aspiraba a completar su contrato con la institución –vence en junio del 2003– y no estaba dispuesto a negociar en ese aspecto. Así, cuando los popes rosarinos emprendían el regreso, el presidente Víctor Vesco, que se quedó Rosario y desea el alejamiento del Flaco desde hace tiempo, dio una orden de destituir al entrenador: “Fueron a despedirlo, no a preguntarle si le gustaría ser despedido”, vociferó el escribano desde su oficina.
A partir de ahí un grupo de dirigentes emprendió el retorno a la ciudad para oficializar la decisión del escribano, mientras que Campagna, Ferguson y Sauan se dirigieron a la AFA, donde fueron recibidos por Julio Grondona. “Antes que nada debemos pactar con el diablo”, musitó un directivo a este diario. La visita al hombre fuerte del fútbol argentino se debió por consejo del Reinaldo Merlo, quien rechazó la oferta para dirigir a Central y sugirió a los directivos consultar a Grondona antes de tomar una decisión al respecto.
Luego del cónclave con Grondona, la directiva que quedó en Buenos Aires se reunía en un restaurante de Capital Federal con Miguel Angel Russo, el entrenador que mejor se llevó con Vesco en los últimos diez años y pasó por el club en 1997. Entre tanto, en la sede centralista de Rosario el escribano presidía la reunión de Comisión Directiva que formalizaba la decisión que tomó horas antes en su oficina.