En menos de 48 horas, el Saint-Etienne, club de la Primera División del fútbol de Francia, que marcha último en la liga de su país y hace 28 años que no sale campeón, se llevó de la Argentina dos jugadores de equipos de los denominados grandes, San Lorenzo y River. Las operaciones por las cuales el delantero Gonzalo Bergessio y el volante Augusto Fernández se van a jugar al fútbol europeo –no precisamente a una liga de las más calificadas– involucra un movimiento de casi 10 millones de dólares. De ese dinero, a los clubes les queda apenas un puchito. No bastará con el cambio de contrato de televisación para poner a los clubes de Primera a salvo de su propio caos organizativo y dirigencial.

Bergessio pasó al club francés a cambio de 6,2 millones de euros, algo menos de 9 millones de dólares. De ese dinero, San Lorenzo recibirá apenas 1 millón de euros, un 15 por ciento por la operación que involucra al delantero, que lleva 41 goles en Primera. El ex funcionario menemista Raúl Delgado, propietario del 50 por ciento del pase, concretó la operación y Bergessio la avaló porque ganará un millón de euros por año, y volverá a Europa tras un fugaz paso por el Benfica en 2007.

Pero Marcelo Tinelli y su socio Gustavo Ranucci –a quienes eufemísticamente se los venía tachando de “grupo inversor” en San Lorenzo– dueños del otro 50 por ciento, no quedaron conformes porque esperaban ganar más dinero por la transferencia. En el caso de Tinelli hay un conflicto de intereses, porque a la vez que empresario privado en la compraventa de jugadores es gerente de marketing del club.

“Estuve hablando con Bergessio y me dijo que tenía posibilidades de irse –contó Leandro Romagnoli, uno que volvió a San Lorenzo–. Uno quiere que se quede pero si es bueno para él y para el club, bienvenido sea. Gonzalo es un jugador importante pero hay como para reemplazarlo.” Parece bueno para el jugador pero no tanto para el club.

Augusto Fernández también fue contratado por el Saint-Etienne, aunque en su caso, a préstamo por un año, en una operación que involucra algo menos de un millón de dólares. De ese dinero, River no recibe un solo centavo. ¿Por qué? Porque en 2006 había vendido al jugador al Locarno de Suiza, a través de las famosas operaciones fantasma por las cuales el empresario israelí Pini Zahavi y sus socios argentinos Fernando Hidalgo y Gustavo Arribas se quedaron con el pase del volante.

En ese momento le vendieron el 30 por ciento del pase en un millón de dólares y luego le cedieron el 70 por ciento restante como comisión por el pase de Gonzalo Higuaín al Real Madrid. Nunca quedó claro el monto del pase pero en su momento el jugador fue valuado en ocho millones de dólares. El representante del jugador, Pablo Sabbag, un apellido de larga data en la dirigencia de River, tomó parte de las tratativas para llevar ahora a Fernández a jugar a Europa.

Gonzalo Bergessio

25 años, 41 goles

Se va por 9 millones de dólares

Porcentaje para San Lorenzo 15 por ciento

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Augusto Fernández

23 años, 3 goles

Se va por 1 millón de dólares

Porcentaje para River 0 por ciento