Un fiscal de Junín pidió que el futbolista de River Diego Buonanotte sea sometido a juicio oral por la muerte de tres amigos como resultado de un accidente de tránsito, ocurrido en diciembre pasado en la localidad bonaerense de Arribeños, porque consideró que actuó con “imprudencia o negligencia”. Fuentes judiciales informaron que el requerimiento de elevación a juicio de la causa fue efectuado por el fiscal 3 de Junín, Carlos Colimedaglia, quien dio por cerrada la etapa de instrucción y pidió que Buonanotte sea juzgado por triple homicidio culposo, el cual prevé una pena de seis meses a cinco años de cárcel.

El próximo paso, adelantaron los voceros, es darle traslado a la defensa para que exprese su posición, es decir, se oponga o acepte el requerimiento. El abogado del jugador, Diego Del Ciervo, dijo ayer por la mañana al canal Todo Noticias que la posición de la defensa “es contraria a la del fiscal”. “No consideramos que haya habido imprudencia de parte de Diego Buonanotte en su manejo, que hubiera contribuido al resultado y tarde o temprano creo que lo vamos a poder demostrar”, sostuvo el letrado. Para Del Ciervo “el fiscal asume la posición de todos los fiscales: intenta decir que si bien la velocidad no era antirreglamentaria, el hecho de la lluvia y demás condiciones lo debieron haber hecho (a Buonanotte) extremar los cuidados”. “Ese es un concepto que no compartimos y nos vamos a oponer a esta posición”, agregó el defensor, al tiempo que destacó: “No habría certeza de que Diego Buonanotte haya sido imprudente o negligente en su manejo, estamos seguros de eso”.

El accidente se produjo la madrugada del 26 de diciembre del año pasado en la localidad de Arribeños, cuando el auto que conducía Buonanotte por la ruta 65, rumbo a Teodelina, Santa Fe, su ciudad natal, se despistó y terminó incrustado en un árbol. Los peritos que trabajaron tras el accidente creen que el auto salió de la calzada por el agua de lluvia acumulada en sectores de la ruta hundidos por el peso de los camiones. Expertos de la Delegación Junín de la Policía Científica detectaron que en el lugar de la ruta 65, donde se accidentó el Peugeot 307 que manejaba Buonanotte, había charcos de agua de hasta tres centímetros de profundidad, que pudieron haber desestabilizado el vehículo.

Además, los peritos determinaron que el automóvil colisionó contra dos árboles, y que al hacerlo contra el segundo “se abrazó” y se deformó como una herradura. A raíz del accidente, tres amigos de la infancia del jugador, Alexis Fulcheri (21 años), Emanuel Melo (21) y Gerardo Suñé (24) murieron, mientras que Buonanotte fue rescatado con vida porque era el único que llevaba puesto el cinturón de seguridad.

El volante de River estuvo internado 12 días, fue operado por una fractura de húmero que lo alejó de las canchas varios meses, y desde el momento del hecho recibe asistencia psicológica para poder superar la muerte de sus tres amigos de la infancia.

Tras el accidente, los análisis determinaron que el futbolista no estaba ebrio al momento del choque, ya que tenía 0,4 gramos de alcohol por litro en la orina –por debajo de 0,5 que es el límite permitido para conducir– y 0, es decir nada, en la sangre.

Buonanotte volvió a jugar en los últimos partidos del torneo Clausura pasado, en el mes de abril, luego de la inactividad que debió cumplir por los problemas físicos sufridos.