Tanto el director del Programa de Seguridad en los Espectáculos Futbolísticos, Javier Castrilli, como el presidente de la AFA, Julio Grondona, coincidieron en que la reanudación de los torneos de fútbol dependerá de los plazos que establezca el juez Mariano Bergés, por lo que prácticamente quedó descartado que el fin de semana haya actividad oficial.
Castrilli y Grondona acordaron ayer la creación de una Unidad Especial Fiscal Móvil, que permitirá a fiscales y jueces investigar los hechos de violencia en el lugar, la modificación del Reglamento de Transgresiones y Penas, y la determinación que, a partir del próximo torneo Clausura 2004 los clubes serán los encargados de la seguridad en sus propios estadios, “por lo que tendrán que recurrir a personal privado, ya que la policía dejará de prestar esa asistencia”, según anunció Castrilli.
“Si todo esto que emprendemos no sale bien y la violencia no se controla, entonces nos tendremos que ir todos”, dijo con vehemencia Grondona, que acudió al Ministerio de Justicia acompañado de Raúl Gámez, titular de Vélez, quien por la mañana declaró durante tres horas ante el juez Bergés.
“Es necesario respetar los plazos de la Justicia –insistió el titular de la AFA–. Por eso, pese a que tenemos todo reprogramado y estamos listos por si el fútbol vuelve antes, no pensamos en ningún momento en que los clubes de la Capital presenten un recurso de amparo para poder jugar ya el próximo fin de semana.”
El Tribunal de Disciplina sancionará hoy a Chacarita con la quita de tres puntos y le dará a Boca por ganado el partido, con el resultado 2-0. Chacarita presentó ayer una nota en la AFA pidiendo que la sanción no se tome mientras el juez Bergés no emita su veredicto.