Luego de veinte años sin argentinos, Guillermo Coria se clasificó ayer oficialmente para el Masters de Houston, que cierra la temporada tenística y en el que intervienen los mejores ocho jugadores del año. Mientras tanto, David Nalbandian se mantiene en la octava posición de la carrera de campeones, con lo que todavía está en condiciones de acceder al tradicional certamen. La noticia de la clasificación de Coria fue anunciada ayer por la ATP, con lo que ya son cinco los tenistas que se aseguraron su plaza en Houston. Tras el Abierto de Estados Unidos, Andy Roddick, Juan Carlos Ferrero, Roger Federer y Andre Agassi se habían garantizado su pasaje, por lo que ahora sólo restan tres cupos.
Con el ingreso de Coria se quebró una racha de veinte años sin tenistas argentinos en un Masters masculino. Desde 1983, cuando José Luis Clerc fue eliminado en Nueva York en la primera ronda ante el español José Higueras, que no había un representante en el torneo que cierra la temporada y que Guillermo Vilas obtuvo en 1974. “Es una gran sensación haberme clasificado al Masters porque fue uno de mis sueños desde chico, y ahora se hizo realidad. Por eso espero que esto sea recibido de manera positiva en mi país y que signifique una alegría para toda la gente”, señaló Coria.
Pero más allá de la consumada clasificación del santafesino, pueden ser dos los argentinos que se presenten en Houston, teniendo en cuenta que Nalbandian es uno de los candidatos a ocupar una de las tres plazas que quedan ya que está octavo en la carrera de campeones. El cordobés tiene 358 puntos y marcha detrás del alemán Rainer Schuettler (sexto con 493) y el español Carlos Moyá (séptimo, con 398), aunque también están con chances los australianos Mark Philippoussis (310) y Lleyton Hewitt (290). La contra para Nalbandian es que todavía se está recuperando de una lesión, y recién reaparecerá en el Masters Series de Madrid. Luego irá a Basilea, donde defenderá el título, y finalizará en París. Los otros jugadores con chances son el holandés Sjeng Schalken, el tailandés Paradorn Srichaphan y el holandés Martín Verkerk.