DEPORTES
› DECLARO BAJO CARGOS DE ENCUBRIMIENTO AGRAVADO
La novia de Di Zeo es policía
La novia del prófugo barrabrava Rafael Di Zeo, detenida el jueves en un operativo en el cual el hincha de Boca logró escapar, es una suboficial de la Policía Federal que ayer fue indagada por el juez de instrucción penal Mariano Bergés. De acuerdo con fuentes judiciales, tras la declaración, Bergés ordenó la liberación de la mujer, que presta servicios en la División Suboficiales de la Policía Federal. La novia de Di Zeo declaró bajo el cargo de encubrimiento agravado y, tras la audiencia, Bergés dispuso liberarla porque fue imputada de un delito excarcelable. Di Zeo, de 41 años, que comparte la jefatura de la barra brava de Boca con su hermano Fernando, continúa con paradero incierto desde que, en la madrugada del jueves, huyó deslizándose mediante sábanas anudadas desde el décimo piso de un edificio de Ramón Falcón 2300, en Flores.
Se conocieron más detalles de lo sucedido en ese procedimiento. Efectivos del departamento Análisis Delictivo de la Policía localizaron a Di Zeo al rastrear una comunicación telefónica que, poco antes de la una del jueves, el barrabrava mantuvo con su novia. Al llegar al edificio de la calle Falcón, en el cual Di Zeo residía desde hace un año, un oficial de civil procuró ingresar junto con la mujer pero al acercarse a la puerta un vigilador privado le impidió el paso, temeroso de que se tratara de un ladrón. Di Zeo, que había bajado para recibir a su novia, advirtió entonces que estaba en riesgo de ser capturado y escapó hacia su departamento del décimo piso, mientras en un forcejeo la policía rompió la puerta de ingreso. Tras cerrar con llave su departamento, cuya puerta está blindada, Di Zeo escapó descolgándose por sábanas anudadas hasta el noveno piso, y desde allí ganó la calle luego de treparse por techos cercanos y acceder al patio trasero de otro edificio.
En el departamento de Di Zeo fueron secuestrados 50 mil pesos, 10 mil dólares y fajos de billetes falsos, armas y municiones de guerra, una pistola magnum, cachiporras, pasamontañas, documentos de identidad en blanco y los recibos de alquiler de una playa de estacionamiento. A través de los recibos, la policía localizó un Peugeot 206 y un Mitsubishi en cuyo interior había una pistola Bersa cargada con balas de punta hueca.