Luis Suárez, el máximo referente y la carta de gol de la Selección de Uruguay, será la gran ausencia de esta Copa América, ya que todavía pesa sobre él la controvertida suspensión internacional que le dio la FIFA luego de haber mordido al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil. En su lugar, será Edinson Cavani el estandarte del equipo celeste que defenderá en Chile el título obtenido cuatro años atrás en Argentina y el trono de máximo ganador del torneo, con quince conquistas.

“Son cosas que pasan en el fútbol y hoy me toca como uno de los referentes de la selección ocupar esta posición y asumir la responsabilidad”, aceptó Cavani, quien con 28 años llega a esta competencia en un nivel altísimo y con la estirpe ganadora que logró en Paris Saint-Germain, ya que en tres temporadas que estuvo en Napoli, de Italia, rompió redes (104 goles en 138 encuentros), pero sólo levantó una Copa Italia.

En la temporada que acaba de finalizar, con 31 goles en 52 partidos, Cavani se consagró bicampeón de la liga francesa, ganó la Supercopa local, la Copa de Francia y la Copa de la Liga, que completaron un total de siete títulos en el club desde que arribó, en julio de 2013, a cambio de 64 millones de euros, lo que significó uno de los pases más caros de la historia del fútbol galo.

Cavani acumula una regularidad sorprendente, ya que teniendo en cuenta los últimos cinco años de las cinco ligas más importantes del Viejo Continente (España, Italia, Inglaterra, Francia y Alemania) es el cuarto goleador, con 153 gritos, por detrás de su compañero, el sueco Zlatan Ibrahimovic, el portugués Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.

Con la selección celeste debutó con 20 años en 2008 bajo la tutela del “Maestro” Oscar Washington Tabárez, quien conduce al seleccionado desde 2006, y participó del cuarto puesto en Sudáfrica 2010 (un gol en seis partidos), la Copa América 2011, los Juegos Olímpicos de Londres 2012, la Copa Confederaciones de Brasil 2013 y de la última cita mundialista, en donde marcó un tanto en cuatro cotejos.

En esta oportunidad, ya sin la compañía de Suárez ni de Diego Forlán, deberá tomar el protagonismo del ataque uruguayo conformado por futbolistas jóvenes que forman parte del cambio generacional que atraviesa Uruguay, como Abel Hernández (24), Diego Rolan (22) y Jonathan Rodríguez (21).

“Espero que sea mi Copa”, deseó el también ex atacante de Danubio y Palermo, de Italia, para el certamen que tendrá a Uruguay en el Grupo B, considerado el de “la muerte”, como rival de Jamaica, el sábado 13 de junio en Antofagasta; Argentina, el martes 16 en La Serena, y Paraguay, el sábado 20, nuevamente en el estadio La Portada de la ciudad del norte chileno.