El pésimo arranque de la selección colombiana genera sensaciones muy diferentes de cara al partido de mañana en Barranquilla por la cuarta fecha de las Eliminatorias. Mientras los hinchas locales se muestran temerosos de sufrir una goleada en contra a manera de venganza del histórico 5-0 de 1993, los jugadores y cuerpo técnico argentinos, que ayer arribaron a Barranquilla, no quieren confiarse por la mala racha que atraviesa el conjunto que marcha último en la competencia. De acuerdo con la opinión de la mayoría del plantel, el momento del equipo que dirige Francisco Maturana lo transforma en un adversario peligroso.
Tras la humillante caída como local ante Venezuela, los hinchas colombianos descreen de las posibilidades de su equipo, sobre todo porque Maturana continúa en su cargo. El entrenador es considerado el principal responsable de la debacle, y la gente ya le cortó el crédito, por lo que pide que se vaya y que le dé lugar a un entrenador que no sea amigo de algunos jugadores. Pero lo más llamativo es el temor latente de una goleada en contra, de proporciones similares al baile que Colombia le pegó a Argentina en el Monumental, casualmente también con Maturana al frente del equipo. “Ustedes vienen por la revancha y me parece que la van a tener”, es la primera frase que recibe un argentino, a diferencia del saludo con la mano abierta que recordaba aquellos cinco goles que metieron Carlos Valderrama y compañía en el Monumental.
Sin embargo, lejos del análisis de los simpatizantes colombianos, el equipo argentino está intentando evitar la relajación. “El partido con Colombia, en cualquier condición, no puede definirse como sencillo. Se trata de un equipo con jugadores de jerarquía. A este encuentro lo catalogamos como complicado”, fue la reflexión del entrenador Marcelo Bielsa. Sus jugadores coinciden en el análisis. “Lo de Colombia no es nada más que una mala racha. Es una selección que tiene grandes jugadores y, cuando logre zafar de esta etapa negra, será un equipo difícil de vencer”, aseguró Javier Zanetti, uno de los referentes del equipo. “Nosotros vamos a jugar a Colombia como si ellos estuvieran primeros en la clasificación”, remarcó el jugador del Inter.
Para Cristian González, la mala campaña de los colombianos se puede convertir en un arma de doble filo. “Seguramente Colombia saldrá a la cancha dispuesta a todo y el partido se hará muy difícil. Cuando uno tiene necesidades, apela a todas las posibilidades a su alcance y ellos las tienen porque cuentan con buenos jugadores”, señaló el volante argentino, que además indicó que la caída que Colombia sufrió ante Venezuela es un accidente al que no está exento ningún equipo. “Lo que le pasó a Colombia le puede pasar a cualquier selección. El fútbol se emparejó mucho en todos lados y no se ganan más partidos con la historia de la camiseta”, comentó González.
De acuerdo con la óptica de Hernán Crespo, el golpe que aplicó Venezuela puede funcionar como un disparador para una levantada o directamente dejar a Colombia sin respuestas anímicas. “Más allá de la mejoría de Venezuela, sorprende la derrota de Colombia en casa. Vamos a visitar a un rival golpeado, pero no sé con qué nos vamos a encontrar, si con un equipo feroz, con hambre de venganza, o con un conjunto abatido”, señaló el goleador del conjunto de Marcelo Bielsa. Igualmente, Crespo remarcó que Argentina no tomará en cuenta el momento de Colombia y jugará su partido.
“Este equipo jamás dependió de los estados de ánimo o las rachas de sus rivales y va a Barranquilla a hacer lo que tiene que hacer allí y en todos lados, que es buscar los tres puntos”, resaltó el delantero del Chelsea.