El capitán de Independiente, Hernán Franco, aseguró que los jugadores buscarán una victoria ante Chicago para despedir con “una alegría” a Osvaldo Sosa, que dejará hoy su puesto de entrenador tras una decisión unilateral de la dirigencia roja. El zaguero afirmó que, a pesar de los malos resultados que se obtuvieron en el Apertura, el grupo “está unido” y espera la llegada de un nuevo entrenador con el propósito de revertir “la mala imagen” que dejó durante el año.
Franco consideró que hay que “olvidarse rápido de todas las cosas malas” que el plantel vivió en las últimas semanas y arrancar “con todo” en el 2004. “Tuvimos un mal año. Pasaron tres entrenadores, se fueron y vinieron varios jugadores, y no conseguimos resultados. Esperemos que con una buena pretemporada podamos ponernos bien para poder afrontar los torneos locales y la Copa Libertadores. Lo bueno del fútbol es que siempre te da revancha”, destacó el defensor.
Ante Chicago, en la última jornada del torneo, Sosa dirigirá por última vez a Independiente. Será el final de un efímero ciclo donde el equipo de Avellaneda cosechó seis derrotas, tres empates y una solitaria victoria. Estos malos resultados llevaron a la comisión directiva del club a rescindir el contrato del entrenador, que vencía en junio de 2004. Los candidatos más firmes para suceder a Sosa son José Omar Pastoriza, César Luis Menotti y Américo Rubén Gallego.
No obstante, el ex Newell’s aseguró que el fracaso no fue sólo de Sosa, ya que, según señaló, “los jugadores también fueron responsables” de la mala campaña que realizó Independiente. “Cuando no se dan los resultados, los responsables somos todos: jugadores y cuerpo técnico. Vamos a tratar de conseguir una victoria para cerrar esta etapa de la mejor forma posible”, remarcó Franco.