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¿Se les atreverán?
Por Diego Bonadeo
Mientras usuarios, gobierno, beneficiarias del menemato, organizaciones de consumidores, opinadores e inexistentes entes reguladores discuten con intereses contrapuestos, qué hacer con algunos servicios públicos, comenzó a sobrevolar entre las medidas de ahorro de energía la alternativa de suspender los partidos nocturnos de fútbol.
Aunque no lo parezca, esta posibilidad puede ser la panacea de quienes desde los escritorios de las corporaciones, en las que se entiende todo de cuentas bancarias y nada de la pelotita y de la gente, imaginaron fútbol con canchas vacías y planillas con mucho rating. Está claro que antes que instar a los usuarios del común a ahorrar energía, la lógica es evitar despilfarros más superfluos, como cartelerías luminosas, iluminación diurna en espacios públicos como plazas y avenidas y demás.
Puede darse que, de suspenderse el fútbol nocturno, las corporaciones interesadas cuestionen, por ejemplo, el funcionamiento de cines y teatros, lo que, aunque descabellado, no es del todo improbable que pase por las mentes y los bolsillos de los dueños del negocio. Pero volviendo a las canchas vacías y a las planillas de rating llenas, la alternativa al fútbol nocturno, dados los fixtures que los equipos argentinos tienen programados en el país, tanto en el orden nacional como en el internacional, será jugar prácticamente todos los días de semana: quizá, inclusive, mañana y tarde, lo que inexorablemente llevará a mucho menor concurrencia que la habitual a las canchas. Otra cuestión pasará por negociar con visitantes internacionales, para que los horarios se compatibilicen con los compromisos televisivos de cada uno.
Ojalá alguien se les atreva de una vez por todas a estas corporaciones. Ya que no es por el lado de la posición dominante y el monopolio, que sea por el del bien común. Del lado de los que se calientan y cocinan a leña, cartonean su llegada a fin de mes, pucherean de la basura y, así y todo, les dan de vivir, comer, viajar y tanto más, a los que firmaron los derechos de televisión hasta el 2014 entre la AFA y Torneos y Competencias.