Dom 20.02.2005

DEPORTES

En la constelación NBA, esta noche brillará una estrella de las pampas

Emanuel Ginóbili participará por primera vez en el Juego de las Estrellas, en Denver. “Voy a divertirme”, comentó. Lo televisa América.

Emanuel Ginóbili está viviendo su sueño. Esta noche, a partir de las 22 y con televisación en directo de América, el argentino será uno de los 24 protagonistas del Juego de las Estrellas de la NBA, el mayor espectáculo que vende la liga estadounidenses hacia el mundo. Una fiesta que llegará a 214 países a través de la televisión, con 57 cadenas que lo emitirán (se calcula que lo verán 3100 millones de espectadores) y con 270 periodistas acreditados de diferentes partes del planeta. Y dentro de ese circo, Manu siguió con su estilo habitual, como si nada de lo que lo rodea pudiera cambiarle su mentalidad. Con la mesura de siempre, el escolta de San Antonio Spurs explicó la razones por las que piensa que los entrenadores de la liga lo escogieron para integrar el equipo del Oeste, donde compartirá espacio con figuras como Kobe Bryant, Tim Duncan o Tracy McGrady, entre otros.
“Creo que para esta convocatoria me ayudó mucho ser parte de uno de los mejores equipos del momento”, remarcó Ginóbili. “Y a pesar de que no hago 20 puntos por partido, que a veces hago menos de 10, creo que los entrenadores han visto que dejo todo en la cancha y cuando no anoto, sí colaboro mucho con el equipo”, indicó el argentino, que aseguró que no siente ningún tipo de presión por tener que rendir en buen nivel en el encuentro de esta noche. “Uno viene acá a disfrutar. Si hacés cero de seis, no importa, porque ya para mí es un gran triunfo. Así que no hay ningún tipo de presiones o responsabilidades, sé que no voy a ser el que va llevar todo el peso del equipo por los compañeros que tengo al lado. Así que vengo a poner mi grano de arena y cuando me toque jugar, pues a divertirme”, indicó el escolta de San Antonio.
Llegar al Juegos de las Estrellas es una meta que sólo un jugador latino había logrado hasta el momento. Incluso, su antecesor, el panameño Rolando Blackman, fue un jugador formado en Estados Unidos, algo que realza más todavía el logro de Ginóbili. Sin embargo, al bahiense esa situación no lo inmuta, ni siquiera cuando le dicen que es el primer sudamericano en estar en un Juego de las Estrellas. “Realmente no me importa si soy el segundo, tercero o el cuarto hispano en el Juego de las Estrellas. Lo que me importa es que es un honor para mí estar aquí. Este es uno de los más grandes logros para un jugador, así que eso es para mí lo más importante. Quiero poder disfrutar y dar lo mejor de mí en este gran evento, con los mejores jugadores de la NBA del momento”, remarcó Manu.
Pero el momento de Ginóbili no sólo se sigue con expectativa en Argentina. Antes de que lo eligieran, Charles Barkey, ex superestrella de la liga y uno de los comentaristas de TV más respetados del momento, había avisado que si el argentino no era escogido, él no iba a viajar de Denver para ver el Juego. Esta noche será su fanático número uno, como siempre se autodefinió. Pero los elogios también llegaron de parte de sus colegas. Ayer en Denver, cuando lo consultaron por un jugador que le gustaría ver, Kobe Bryant no tuvo dudas en su elección. “Mi jugador favorito para ver es Manu Ginóbili, simplemente porque es impredecible y tiene un estilo muy particular”, afirmó Bryant, que se está recuperando de una lesión y por eso no tendrá demasiados minutos en el partido de hoy. El alemán Dirk Nowitzki, otro de los participantes, tampoco dudó en exhibir su orgullo por compartir el campo con el argentino. “Me pone feliz que hayan elegido a Manu en mi equipo. Tengo ganas de jugar con él. Ya nos enfrentamos muchas veces, pero ahora vamos a ver si me pasa la pelota y si mete más puntos que yo. Por lo menos no voy a sufrirlo”, comentó el alemán, que con su selección cayó con la Argentina de Ginóbili en las semifinales del Mundial de Indianápolis 2002.
Gregg Popovich, entrenador del argentino en San Antonio Spurs y técnico del equipo del Oeste en Denver, también expresó su satisfacción por el momento que atraviesa su dirigido. “Gino es un gran muchacho. Juega bien, tiene carisma y logró dejar su estilo y huella en nuestra liga. Su llamado es un reconocimiento al buen trabajo que ha realizado”, señaló Popovich, que seguramente esta noche disfrutará del juego de Manu y no necesitará retarlo.

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