El desgarro que Gastón Gaudio sufrió durante el torneo de Acapulco lo deja al margen del partido de Copa Davis ante la República Checa, en el Buenos Aires Lawn Tennis, dentro de una semana, entre el viernes 4 y el domingo 6 de marzo. El campeón de Roland Garros se retiró con un dolor en la espalda cuando enfrentaba al checo Tomas Zib, quien precisamente será uno de los doblistas del conjunto de su país que se presentará en Buenos Aires durante la semana venidera. El jugador de Temperley confesó estar “asustado” ante la perspectiva de quedar marginado de la competencia por equipos más importantes del tenis mundial.
“Tengo un bajón terrible”, confesó anoche Gaudio, minutos antes de tomar su vuelo con destino a Buenos Aires. El argentino se hará hoy exámenes para determinar el grado de su lesión en el abdominal izquierdo, que su entorno teme que sea un desgarro. “Hasta que no se haga el estudio no se va a saber si la lesión es un desgarro –indicó el entrenador de Gaudio, el ex tenista Franco Davín–, pero los síntomas indicarían que puede haber alguna fibra rota.”
Gaudio, reciente ganador de los torneos de Viña del Mar y Buenos Aires, se impuso con claridad mostrando un juego variado y brillante en el primer set del encuentro ante Zib, para luego caer en forma ajustada en el segundo por 7-5. Al finalizar este parcial, el tenista argentino comenzó a tomarse la espalda, y con muestras de dolor le comunicó al juez de silla que abandonaba el partido, ante la sorpresa del público presente en el estadio central.
“Me parece un poco raro, estoy un poco asustado. Es una de las primeras veces que abandono en mi vida, y la verdad es que tengo miedo de no poder jugar la Davis”, admitió Gaudio luego de perder por abandono en este compromiso de primera ronda. Más tarde, afirmó: “Para mí la Davis es lo máximo y esto me golpea mucho. Ahora me vuelvo rápido a Buenos Aires para ponerme a disposición del equipo”.
Davín no cree que Gaudio pueda jugar la semana próxima frente a los checos. “Normalmente los tiempos no darían para estar jugando el viernes un partido a cinco sets, y más pensando que Argentina tiene un recambio impresionante de jugadores”, apuntó. “Jugar sería riesgoso por partida doble –admitió– tanto para el equipo argentino como para Gaudio”, sentenció.
“Entrando en calor me empezó a molestar, y mientras jugaba el dolor iba aumentando cada vez más. Quise seguir por el orgullo, pero la verdad que ahora me da mucha pena haber puesto en duda mi presencia en la Davis”, contó Gaudio, quien negó terminantemente haber especulado con cobrar una garantía económica por parte de los organizadores del torneo, del que era el segundo favorito, para abandonar en el primer partido y preparar con más tiempo la serie de Copa Davis. “No me interesa, no voy a cobrar nada. No tiene sentido venir y abandonar, eso sería una falta de respeto para con la gente”, aseveró.