Central se convirtió en el dueño de Rosario al ganarle el clásico a Newell’s por la mínima diferencia y eliminarlo de la Copa Sudamericana. Después de un partido ardorosamente disputado, pero con momentos de buen fútbol, el equipo del barrio de Arroyito justificó la victoria con la superioridad establecida en el complemento, a partir de la ventaja lograda por Rivarola cuando se moría la primera mitad y gracias al desconcierto de su tradicional rival que, sin embargo, pudo empatarlo en el último segundo, con un tacazo de Silva que contuvo Ojeda. El próximo rival de Central se conocerá el jueves, cuando San Pablo reciba al Internacional de Porto Alegre, que en el partido de ida había ganado 2-1.
Los dos conjuntos se repartieron el dominio del primer tiempo, con varias jugadas de riesgo: la mejor la tuvo Scocco cuando, después de un taco de Silva, tiró un par de sombreros consecutivos, que obligó a Raldes a sacar la pelota de cabeza en la línea.
Pero cuando se acababa el primer tiempo, un tiro libre desde la derecha, ejecutado por Ferrari, fue peinado en el primer palo por Ruben hacia atrás, por donde apareció, sin marca, Rivarola, que la conectó, de volea y de zurda, por sobre la cabeza de Villar, en un bombazo inatajable.
En el segundo tiempo, Olmos movió el banco y mandó a la cancha a jugadores más determinantes, como Belluschi o Manso, pero Central ya controlaba el partido, dejando venir a su rival y saliendo rápido en la réplica.
El clásico rosarino se transformó anoche en un gran suceso para la ciudad. Los comercios cerraron más temprano que de costumbre; las radios y los canales de televisión locales le dedicaron la mayor parte de sus transmisiones al gran duelo revancha por la Copa Sudamericana, y en los bares, confiterías y restaurantes no hubo otro motivo de conversación.
Sin embargo, el final fue repro-chable, con incidentes entre los hinchas de Newell's, molestos con la eliminación, y la policía rosarina, que usó balas de goma y palos como elementos de disuasión de los hinchas que se negaban a abandonar la tribuna. El estadio de Arroyito estuvo lleno al 90 por ciento. Para controlar a los más de 40 mil hinchas hubo 1300 policías, asistidos por 150 jóvenes voluntarios del programa “No más violencia”. Pero la hubo.


1-CENTRAL
Ojeda; Moreira, Raldes, Fassi, Rivarola; Ferrari, A. Díaz, Calgaro, Papa; Vitti, Ruben.
DT: Ariel Cuffaro Russo.
0-NEWELL’S
Villar; Vella, Maidana, Spolli, Ré; Scocco, Zapata, Lucero, Giménez; Steinert, Silva.
DT: Juvenal Olmos.

Estadio: Central.
Arbitro: Horacio Elizondo.
Gol: 44m, Rivarola (C).
Cambios: 51m, Osorio por Scocco (N); 61m, Belluschi por Lucero (N); 70m, Manso por Steinert (N); 73m, Monges por Vitti (C); 85m, Ledesma por Ruben (C); 90m, Leonforte por A. Díaz (C).