Cuando parecía que definitivamente estaba dejando atrás sus problemas de salud, Ariel Ortega habría sufrido una nueva recaída por su adicción al alcohol. Si bien esto no fue confirmado ni por el club ni por el técnico Daniel Passarella, ésa habría sido la causa por la cual se retiró rápidamente del entrenamiento que el plantel realizó ayer. Luego del mismo, Passarella dijo que el delantero no se encontraba en condiciones para entrenarse, aunque aclaró que “no fue porque llegó tarde”. Ortega se presentó cerca de las diez a la práctica, pero se fue inmediatamente por decisión del técnico.

El entrenador habló con los periodistas luego del trabajo y puntualizó que Ortega “no estaba en condiciones de entrenar con sus compañeros. No fue porque llegó tarde, sino que no estaba en condiciones de hacerlo”. Y cuando el conductor fue interrogado por los inconvenientes personales del jugador, Passarella respondió molesto: “No voy a hablar más de Ortega, no quiero ser reiterativo”.

El jujeño estaba teniendo continuidad en el tramo final de este torneo y ya estaba jugando nuevamente como titular. Inclusive, Ortega rechazó una oferta del fútbol mexicano que recibió en los últimos días, porque su intención era formar parte de la nueva temporada que comenzará el conjunto de Núñez. Ortega había sufrido su última recaída cuando sus compañeros se encontraban en Colombia para visitar a Caracas, antes de quedar eliminado de la Copa Libertadores. Anteriormente, el jujeño abandonó la pretemporada en Mar del Plata, en enero pasado, y regresó a la Capital para hacer un trabajo especial en su recuperación.

Por otro lado, sobre la reunión que mantuvo el jueves pasado con el presidente del club, José María Aguilar, el entrenador comentó que “fue una charla normal, como mantenemos muy a menudo. Hablamos de los temas de River. El club va a tratar de vender algunos jugadores y ver si puede traer algún jugador haciendo inversiones menores, pero todavía no tenemos pensado ningún nombre”.

A su vez, Passarella se mostró totalmente en contra de intervenir en la Copa de la Paz, que se jugará en Corea a partir del 14 de julio próximo. “Mi postura es no viajar. Hacer la gira me parece una masacre. No tiene sentido ir, no es serio. No nos favorece en nada.” Y agregó: “Yo doy mi opinión, después, si los dirigentes la quieren hacer, la haremos”. En caso de participar de esa Copa, la institución de Núñez percibirá 500 mil dólares. Y si sale campeón, embolsará dos millones de esa misma moneda.