Mié 27.06.2007

DEPORTES  › LIBERARON A LOS 78 DETENIDOS

Buscan al asesino del hincha de Tigre

Sería un capo de la barra de Chicago. Piden duras penas contra el club.

El juez que investiga el asesinato del hincha de Tigre Marcelo Cejas, que murió a la salida del estadio de Chicago, sigue la pista del jefe de la barra brava del club de Mataderos, a quien se supone instigador del crimen, aunque ya no quedan detenidos. Los dirigentes de Tigre denunciaron que sus jugadores fueron amenazados con armas de fuego en la cancha y sus hinchas resultaron emboscados y mientras el secretario de Seguridad en Espectáculos Deportivos, Javier Castrilli, prometió sanciones para Chicago, y el Coprosede ordenó jugar sin público los partidos que restan por la Promoción y el Reducido de la Primera B, el fiscal de La Plata Marcelo Romero, el mismo que debió cerrar la causa sobre el “apriete” a los futbolistas de Gimnasia por falta de pruebas, pidió que el Gobierno intervenga la Asociación de Fútbol Argentino ya que, a su criterio, “es palmaria la inoperancia de esta institución frente a los innumerables hechos de violencia en los estadios. Ni siquiera se escuchan excusas originales y creativas”, acusó.

El juez de instrucción subrogante Omar Peralta, que investiga el asesinato de Cejas, implantó por diez días el secreto del sumario en el expediente, y anoche tomaba declaración a cuatro de los 78 detenidos. Todos recuperaron ayer la libertad. Se sospecha de un jerarca de la barra brava de Chicago, que ya habría huido rumbo a Tucumán, donde vivía antes de 2004 cuando vino a Buenos Aires. Peralta ordenó anoche entregar el cuerpo de Cejas a los familiares, que lo inhumarán hoy.

Castrilli, que tomó una licencia en su cargo para trabajar en su candidatura a intendente del partido de Almirante Brown, responsabilizó a Chicago por los incidentes. “Lo que se necesitan son sanciones –afirmó–. Queremos que los delincuentes vayan a la cárcel. Necesitamos los presos ahora, no dentro de nueve años.” Al club le cabría una pena deportiva de 3 a 30 puntos y una suspensión de su cancha de hasta nueve partidos.

“Esto seguramente fue una emboscada –dijo ayer el vicepresidente de Tigre, Pablo Rubino–. Los jugadores estaban una hora y media antes del partido dentro de la cancha y vieron gente con armas”, puntualizó.

Luis Parietti, miembro del Tribunal de Disciplina de la AFA, sostuvo que “fue una barbarie. Es responsabilidad exclusiva del club local, porque los directivos de Chicago dejaron ingresar a la barra por el túnel”. José Luis Lemme, presidente de Defensa y Justicia y representante de la AFA en la Comisión de Seguridad Deportiva, aseguró que “cuando la policía quiere, no pasa absolutamente nada. Pero esta vez existió un operativo liviano”.

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