Por R.I.B.

Luego del último entrenamiento previo al test, Felipe Contepomi y Agustín Pichot, los encargados de mover los hilos de Los Pumas, se distendieron analizando, previendo y pronosticando qué podría suceder si hoy las cosas se hacen bien. Para Felipe Contepomi, apertura de la selección, el enfrentamiento de esta noche ante Australia, “es el tipo de partidos que cualquiera soñaría jugar, ya que es contra el campeón del mundo y en River”. Un sentimiento compartido por todos.
Al referirse al aspecto personal, Felipe manifestó estar “muy tranquilo”. Y el objetivo –más allá de que se pueda llegar “lo mejor posible al test”– es muy claro: “Hay que mejorar lo que hicimos en la primera mitad del año (victoria sobre Francia y derrotas ante Inglaterra y Sudáfrica), ya que en esos partidos cometimos muchos errores de manejo”.
Al momento de definir el eje por dónde transitará el testmatch, sostuvo: “La clave será estar muy atentos a todo porque Australia es el equipo con más variantes que existe. Los Wallabies son muy fuertes en todos los aspectos, tanto en los forwards como en los tres cuartos, pasando por el line y el scrum, por eso tendremos que mantener la concentración durante los 80 minutos para no ofrecer puntos débiles por dónde nos podrían atacar.”
Uno de los objetivos que se fijaron los entrenadores Loffreda y Baetti es cuidar al máximo la posesión de la pelota, un punto que quedó con saldo deficitario en los anteriores enfrentamientos. “En cuanto al planteo táctico –observó Contepomi– sabemos qué es lo que nos conviene hacer, ya que conocemos nuestras fuerzas y limitaciones, y debemos saber cómo aprovecharlas. Por otra parte, los entrenadores están proponiendo un juego más atractivo y desplegado. Sólo que debemos ‘leer bien’ la cancha para saber en qué momento utilizarlo”.
Por su parte, Agustín Pichot, medio scrum y máxima figura argentina, se refirió al planteo albiceleste al destacar que el hilo del partido pasará por el control del rival. “Esperemos que podamos controlar a Australia. La forma más adecuada será atacándolo con el juego que desarrollamos a lo largo de los entrenamientos.”
Sobre la controvertida ausencia de Gonzalo Quesada, goleador del último mundial, expresó: “Me sorprendió que haya quedado afuera. Como amigo y compañero se me hace difícil que no esté, pero desde adentro se complica decir si está bien o está mal, ya que como jugador uno no está en la instancia de decisión”. A la hora de recordar al “Queso”, Pichot sólo tuvo palabras de aliento para su compañero: “Gonzalo es un gran jugador y sé que se va a esforzar para estar de nuevo en el equipo”.