Mariano Lorenzetti todavía no puede encontrar al camión que atropelló su moto en la etapa a San Juan, dos días atrás; asegura que su hermano abogado iniciará una demanda judicial “por abandono de persona” cuando sepa quién fue el responsable del incidente, que lo dejó fuera del Dakar en el que había comprometido todos sus ahorros. El piloto de la KTM encontró un aliado impensado: la organización del Dakar, los franceses de ASO, está investigando para determinar cuál fue el camión de la tropelía y le avisaron que cuando lo encuentren habrá represalias. Lorenzetti quiere que lo ayude a juntar el dinero para correr el Dakar 2013.

Son los pilotos de Hugo Chávez: Nunzio Coffaro y Daniel Menezes conforman el primer equipo venezolano en el Dakar y corren con el apoyo de la petrolera estatal. Pero Coffaro manejó mucho más que los 2900 kilómetros que separaron Mar del Plata de Chilecito, adonde llegaron en el 58º lugar, a casi seis horas de la punta. Fue el encargado de conducir el camión de asistencia del equipo desde Caracas, ante la imposibilidad de trasladarlo por barco a la Argentina. Sólo en la cabina, el calentamiento fue intenso: 16 días de camino, pasando por Bogotá, Quito y Lima antes de entrar al país por el paso de Jama y reunirse con el equipo en Buenos Aires el día de Navidad tras conducir 9000 kilómetros. Le quedan todavía más de 5000 kilómetros para ver la meta.

Casi es medianoche cuando el Mitsubishi (modelo 2003) número 445 llega al final de la tercera etapa, en San Juan. A bordo, un solo hombre, el vasco Ignacio Corcuera, que acaba de pasar más de diez horas en el camino y ¡no sólo al volante del coche! “Pinché justo después de las dunas del Nihuil, en la segunda etapa, y en lo que tardé en cambiar la rueda, los camiones habían dejado el terreno completamente imtransitable –cuenta–. Así que no podía pasar por ahí, ¡sobre todo de noche! Decidí, por lo tanto, parar a dormir y llegué al vivac por la mañana. Como volví a largar atrás de los camiones, con un terreno tan pedregoso, varias veces tuve que buscar el camino a pie para encontrar la senda correcta, puesto que ya no se podían ver señales claras de neumáticos. Más vale que me vaya acostumbrando, todos los días voy a salir detrás de los camiones, hasta Lima.”

Etienne Smulevici y Yoshimasa Sugawara muestran tantas similitudes como diferencias. Sus vidas vuelven a cruzarse una vez más con motivo del Dakar 2012, en el que ambos celebran su 30ª participación consecutiva en el rally más exigente. Todo comenzó para ambos en la edición de 1983 del París-Dakar. Sin embargo, sus trayectorias son esencialmente muy diferentes. Sugawara descubrió el Dakar en moto, con tres intentos fallidos, antes de pasar al coche y luego al camión. En total, el piloto japonés llegó a la meta final del Dakar en 27 ocasiones, en cuatro fue segundo y a Chilecito llegó 18º. Smulevici, de 64 años, ha sido siempre fiel al coche. En las veinte ediciones del Dakar que terminó, el piloto parisino cuenta con un 18º puesto como mejor resultado. En Chilecito estaba clasificado en el 78º lugar.