El secretario del club uruguayo Fénix, Alvaro Chijane, admitió que su club participa de “triangulaciones” en transacciones de futbolistas, y se jactó de los “buenos negocios” con representantes argentinos a tal punto que, con una operación, la entidad pagó los salarios de todo un mes. “Nosotros hacemos estas triangulaciones, vamos a decir pases puentes, como le llamamos en Uruguay. A nosotros la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) nos descuenta cuando son pases a préstamo o es pase definitivo, aquí no hay ningún delito, acá se pagan todos los impuestos”, afirmó. El hermano de Chijane, Jorge, es el presidente de Fénix y de aceitados contactos con el empresario uruguayo Paco Casal. El club tuvo los derechos económicos y federativos de Denis Stracqualursi (ahora en San Lorenzo), Facundo Roncaglia (pasó de Boca a la Fiorentina) y Emanuel Gigliotti (acaba de pasar de San Lorenzo a Colón), pese a que nunca jugaron allí. Fénix y otros clubes como Sudamérica y Progreso de Uruguay o Unión San Felipe de Chile se valen de la cláusula de la FIFA que impide a personas físicas ser dueñas de pases de futbolistas.