Después de cuarenta años, Franco Rotelli continúa sosteniendo en el mundo las banderas de la desmanicomialización, la reforma de la atención en salud mental que, liderada por Franco Basaglia, tuvo su punto de partida en Trieste, Italia. Desde 2010 preside la Conferencia Permanente para la Salud Mental en el Mundo, que, con auspicio de la OMS, brinda asesoramiento en los distintos países que van emprendiendo la reforma, instaurada internacionalmente desde hace años.

Más aún, como director del sistema de salud de Triste, Rotelli aplicó a la salud pública en general los conceptos de inserción y participación comunitaria desarrollados en el orden de la salud mental: un proceso que, a la inversa de la medicalización del padecimiento psíquico, podría llamarse la desmanicomialización de la atención médica en general.

En su diálogo con Página/12, Rotelli elogió la Ley de Salud Mental argentina –“Es incluso mejor que la que tenemos en Italia”–, pero advirtió que “si ustedes quieren aplicar realmente la ley, necesitan un plan nacional y uno en cada provincia, con un compromiso muy claro del poder político”.