MARES PROFUNDOS
Virginia Rodrigues
Universal, 2003

La voz, extraordinaria, recuerda a Mercedes Sosa, sobre todo por su inusual homogeneidad: tan espesa y consistente en los graves profundos como en los agudos. Que el director artístico del CD sea Caetano Veloso ya acerca un dato. Que el arreglador sea Luiz Brasil, también. El repertorio incluye afrosambas de Baden Powell y si hiciera falta un solo argumento para recomendar este álbum, alcanzaría con Tristeza e solidao, donde la intérprete canta junto a dos violines y el cello de Jacques Morelenbaum. D. F.



A NIGHT IN VIENNA
Oscar Peterson
Verve, 2004

Lejos de la exuberancia de hace treinta años y víctima de una parálisis parcial, el gran pianista canadiense, en este disco grabado en vivo en la Musikwerein de Viena hace un año, convierte las limitaciones en virtud. Con un grupo excepcional –Niels-Henning Oersted Pedersen en contrabajo, Ulf Wakenius en guitarra y Martin Drew en batería–, Peterson hace temas propios, bucea en la expresividad más que en el virtuosismo y se desliza, con sutileza notable, entre el oleaje contrapuntístico construido por sus compañeros. D. F.



CRISTOBAL REPETTO
Idem
Surco, 2004

Lejos de las imposiciones interpretativas más arquetípicas (la escuela goyenecheana, la estampa viril de Sosa), la voz de Cristóbal Repetto sorprende por la evocación de cantores como Corsini y A.Magaldi. Repetto tiene 24 años y un pasado reciente en Bajofondo Tango Club, referencias que deben obviarse al escucharlo: en los antípodas de la electrónica, criollito y acompañado por guitarras, canta tangos añejos y milongas. Su timbre de voz puede fascinar o molestar, lo que no hace más que proyectar viejas polémicas tangueras. F. D.



FLOR DE AMOR
Omara Portuondo
Warner, 2004

Omara Portuondo tiene una voz austera y dúctil, que parece transitar con natural levedad por la historia de la música cubana. Su condición de leyenda globalizada por el Buena Vista Social Club podría eximirla de esfuerzos adicionales, pero aquí la han rodeado de excelentes músicos y arregladores: Omara luce espléndida cantando hermosos sones, guajiras y boleros, que dan la sensación de haber sido escritos para que ella los vuelva a interpretar. Como yapa, interpreta un tema que le compuso Carlinhos Brown. F.D.