Luego de que el Banco Central decidiera anteayer dejar flotar el dólar en línea con las depreciaciones de la monedas de la región, ayer decidió aplacar la corriente compradora y contener una nueva disparada. Esto implicó realizar una fuerte intervención en la plaza cambiaria. La cotización finalizó en 3,63 pesos, un centavo arriba del cierre previo, pero en la primera mitad de la jornada se posicionó firme en 3,64. En lel mercado estiman que el Central volcó cerca de 150 millones de dólares para retraer el tipo de cambio, aunque desde la entidad detallan que el saldo fue “ligeramente vendedor”. En tanto, el panel de empresas líderes de la Bolsa porteña bajó nuevamente. El Merval finalizó con un retroceso de 1,4 por ciento a su nivel más bajo desde diciembre último. La caída estuvo ligada al mal desempeño de Wall Street.

Las devaluaciones de las monedas de los países socios de la Argentina y el delicado escenario internacional volvieron a ser la tópicos elegidos por los cambistas para explicar la suba del dólar. Sin embargo, la abrupta escalada del lunes generó cierto desconcierto entre los operadores. “Se llegó a operar desde 3,604 hasta 3,626 en el mayorista por la mañana y hubo incluso ofertas a 3,64”, dijo el responsable de una mesa de cambios.

En ese momento el Central decidió ponerle un corte con una oferta de 100 millones de dólares, a 3,62 pesos, y colocó el techo a la divisa para el resto del día. Esa liquidez y precio conformaron al mercado y, más tarde, el tipo de cambio bajó a 3,611 pesos, cuando el Central ofertó otros 100 millones de dólares que no se llegaron a operar en su totalidad. La divisa finalizó entonces en 3,6125 pesos. En las pizarras de bancos y agencias de cambio del microcentro se ofreció en promedio a 3,63 pesos.

El Central insistió en que el saldo de su intervención en el mercado cambiario fue “ligeramente vendedor”. Sin embargo, el stock de reservas se redujo en unos 40 millones de dólares, a 46.957 millones.

La tendencia del dólar en la región volvió a ser alcista. El real operó en un mínimo de 2,45 por billete verde. En tanto, se verificó un leve recorte de pérdidas en Wall Street. La Bolsa de Nueva York terminó en baja una sesión vacilante incapaz de encontrar elementos concretos para recuperarse, luego de la caída del lunes. El Dow Jones cedió 0,6 por ciento y el Nasdaq, 0,15 por ciento. En tanto, la Bolsa de San Pablo se permitió un respiro y obtuvo una suba de un 1,0 por ciento.

Antes de que los números en rojo se apoderaran de Wall Street, las Bolsas europeas cerraron con fuertes bajas que ubicaron el índice DJ Stoxx 600 –que mide el desempeño de los títulos más importantes de las empresas del Viejo Continente– en su valor más bajo en doce años. A diferencia de la víspera, cuando cayó más del 10 por ciento, el precio del petróleo avanzó ayer 3,7 por ciento, ante las renovadas amenazas formuladas por la OPEP de recortar aún más la producción de crudo (ver aparte). En este contexto el Merval no pudo sostener una recuperación inicial. La suba de 1,3 por ciento del comienzo perdió fuerza con el paso de las horas. Finalmente cerró en 930 unidades. A pesar del alza en el precio del petróleo, Tenaris, vinculada con la producción de crudo, sufrió un recorte del 1,5 por ciento. En cuanto a los volúmenes, prácticamente uno de cada dos pesos transados fueron en papeles del firma del grupo Techint. El monto operado fue de 37,8 millones de pesos. Por el lado de los bonos la búsqueda de oportunidades alentó la recompra de posiciones. Las compras selectivas beneficiaron al Boden 2012 y 2013 con subas del 2,5 y 2,7 por ciento, respectivamente.