Las cuentas públicas mostraron en febrero una fuerte caída interanual en el superávit fiscal. El resultado, antes del pago de intereses de la deuda externa, fue de 1603 millones de pesos, un retroceso del 49,5 por ciento con respecto al mismo período de 2008. En lo que va del año se registra un saldo positivo por 3605 millones. Desde el Gobierno destacaron que la preservación del superávit fiscal se desarrolló en un escenario adverso debido a la profunda crisis internacional.

El resultado financiero, que se alcanzó luego de pagar intereses, fue de 638 millones y acumula 1683 millones en lo que va del año. El mes pasado los ingresos totales ascendieron hasta los 17.703 millones, que implicó un crecimiento interanual del 11,6 por ciento. Esta suba estuvo impulsada por las mayores contribuciones a la Seguridad Social (que antes recaudaban las AFJP) y los ingresos tributarios. Ese saldo se obtuvo pese a la caída del 9,7 por ciento en la recaudación vía retenciones.

“Se mantiene la política de gasto productivo”, sostuvo el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, encargado de realizar el anuncio. El funcionario detalló los mayores aportes de capital como política anticíclica en programas destinados a la vivienda, obras viales y de las empresas Enarsa y AYSA. El gasto primario fue de 16.099 millones, que significó un alza interanual del 22 por ciento. Pezoa destacó que “éstos no son gastos excesivos, como lo quieren mostrar algunos (economistas), sino gastos productivos”.

Desde el Ministerio de Economía señalaron que “se mantiene una política fiscal destinada a fortalecer el mercado interno, desarrollando una fuerte inversión en obra pública y sosteniendo una política económica sin descuidar el mantenimiento del superávit de las cuentas públicas”. Respecto de la creación del fondo social coparticipable con las retenciones de soja, Pezoa señaló que “no afecta en absoluto el desenvolvimiento de las metas fiscales de 2009”. En 2008, las cuentas del Estado cerraron con un superávit fiscal de 32.528 millones de pesos, un 26,7 por ciento más que lo obtenido en 2007. Para este año, el secretario de Hacienda reconoció que posiblemente las metas fiscales fijadas en el presupuesto podrían no cumplirse por el cambio de escenario internacional.