La demanda de dólares continuó ayer firme y requirió de una intervención más profunda del Banco Central. El organismo participó desde temprano en la operatoria vendiendo todos los dólares que solicitaba el mercado y sobre el final permitió que se depreciara la moneda local. Con un abultado volumen de negocios, la divisa estadounidense avanzó en el segmento mayorista algo más de dos centavos para cerrar la semana en 3,715 pesos, mientras que al público las agencias de cambio y bancos del microcentro lo ofrecían en pizarra a 3,73 pesos.

Con la atención en las elecciones de junio y el lockout del campo, los cambistas se manifiestan desconcertados a la hora de vaticinar cuál será el próximo movimiento del billete verde. La demanda se mantiene firme desde octubre, pero a partir del comienzo de la segunda temporada del conflicto agrario, el desequilibrio se acentuó. Sucede que los exportadores ingresan lo indispensable para cumplir con sus obligaciones y el monto no llega a cubrir los pedidos de compra privados.

La intensificación de la salida de fondos obligó al Central a fortalecer la intervención. “La oferta de los exportadores no alcanza. El BC volcó unos 120 millones de dólares en la plaza y después lo dejó subir. Muy parecido a lo que pasó ayer (por anteayer), pero con más negocios”, dijo a Página/12 el responsable de una mesa de cambios. Los exportadores están ingresando en el mercado entre 30 y 40 millones de dólares, mientras que a esta altura el año pasado liquidaban entre 70 y 80 millones diarios. Esa cantidad ahora se espera que llegue recién en abril, con la cosecha gruesa más avanzada.

Otro factor es cuál será la respuesta del mercado en tiempos preelectorales. “También habrá que ver qué sucede con el campo y el contexto mundial, ya que de seguir el malhumor o los bajos precios internacionales, los productores podrían optar por liquidar sólo una parte en el mercado”, explicó el cambista.

La intervención se centró entonces en el dólar físico. Las operaciones a futuro se llevaron a cabo entre privados y el Central apenas colocó unos 100 millones de dólares en contratos a plazo. Los bancos no se mostraron interesados debido a que finaliza marzo y tienen que “dar vuelta sus posiciones” (vender sus contratos, y viceversa) el último día del mes. La cotización mayorista cerró en 3,715 pesos. El stock de reservas internacionales en poder del Central se redujo en 75 millones de dólares a 46.865 millones.

Al público, la divisa estadounidense se ofreció en el microcentro porteño a 3,73 pesos. En lo que va de marzo arrastra una suba de 15 centavos o de 4,2 por ciento, y en el año la diferencia se estira a 7,5 por ciento. En algunas casas de cambio de la city se verificaron posturas de 3,69 pesos para la compra y 3,735 la venta, revelando que la operatoria minorista aún prevé nuevas alzas para el inicio de la próxima semana.