ECONOMíA
› ECONOMIA PREPARA LA RESPUESTA AL ULTIMO BORRADOR
La pelota irá para el Fondo
El Gobierno enviará a Washington entre hoy y mañana la respuesta al último borrador de la Carta de Intención que escribió el FMI. El equipo económico estuvo trabajando ayer en los aspectos fiscales, buscando acercar posiciones con el organismo. “Hay alguna aproximación en las conversaciones. Tenemos expectativas de que se pueda cerrar antes del 14, pero hay que esperar. Vamos a firmar sólo cuando tengamos un acuerdo satisfactorio”, indicó a Página/12 un colaborador de Roberto Lavagna. El ministro de Economía recibió un fuerte respaldo a su estrategia de negociación por parte de Eduardo Duhalde, quien salió a desmentir versiones sobre un supuesto descontento con su trabajo. “Lavagna es el mejor ministro de Economía de los últimos años”, enfatizó el Presidente, buscando abortar cualquier especulación.
Todavía no hay ninguna definición sobre cómo continuarán las discusiones una vez que las autoridades del Fondo reciban la respuesta argentina a su borrador de Carta de Intención. En el Palacio de Hacienda esperan que la última versión se acerque bastante a la definitiva, para que el acuerdo se pueda firmar antes de la fecha del vencimiento con el Banco Mundial, el próximo jueves. El Gobierno cumplirá hoy con un pago de 181,3 millones de dólares al FMI, correspondiente a intereses de la deuda. Sin embargo, Duhalde volvió a insistir en que no se utilizarán más reservas del Banco Central para girarles a los organismos. “Emplear más divisas sería absolutamente inviable para el país”, remarcó.
El Gobierno cosechó ayer el apoyo del titular del BID, Enrique Iglesias, y uno más inesperado de banqueros españoles. El funcionario de uno de los organismos con los que la Argentina podría entrar en cesación de pagos afirmó que “el país ha hecho ajustes muy importantes a lo largo del año para poder acercarse a las condiciones básicas de un acuerdo con el FMI”. Por su parte, el economista jefe del español BBVA, Miguel Sebastian, se manifestó “harto del fundamentalismo del FMI” por las exigencias hacia la Argentina y Brasil. Otros banqueros de ese país se pronunciaron en el mismo sentido.
En un momento muy difícil de la negociación, el Presidente decidió respaldar a Lavagna. Algunas versiones indicaban que el presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, le habría aconsejado a Duhalde que flexibilice su posición frente al Fondo, que desautorice a Lavagna y que haga todo lo posible por alcanzar el acuerdo. Antes de que esas especulaciones crecieran, Duhalde le dedicó a Lavagna varios elogios, calificándolo como “una figura política muy interesante en este momento” y como “un hombre muy capacitado y además firme, que es lo que necesita la Argentina en este momento”.
Para cumplir con una de las demandas del Fondo, el Gobierno está analizando qué mecanismo sería viable para que haya algún compromiso político en favor del acuerdo. Una forma sería que el Congreso apruebe las condiciones pactadas. El FMI quiso imponer que los candidatos presidenciales se comprometieran a respetar el acuerdo, pero Lavagna se puso firme en rechazar esa exigencia.