Entre julio y septiembre la economía cayó 0,3 por ciento con respecto al mismo período del año pasado. Es la segunda vez que se registra un retroceso desde 2002, según informó el Indec. En la comparación desestacionalizada –contra el trimestre anterior– el nivel de actividad se estancó y no mostró variación. El consumo público y la inversión interna bruta son los principales componentes de la demanda agregada que en el tercer trimestre sufrieron un franco retroceso. Sin embargo, ya para el cuarto trimestre, el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) de octubre mostró ciertas señales de reactivación. En octubre, el indicador subió 0,6 por ciento respecto al mismo mes el año pasado y 0,5 contra septiembre. La situación de leve mejora también se observa en el sector industrial (ver aparte).

La caída del producto en el tercer trimestre estuvo impulsada por la disminución del consumo privado (-0,7 por ciento) y la inversión interna bruta fija (-12,7), fundamentalmente en construcciones (-5,7) y equipos durables de producción (-21,3). En cambio, el consumo público fue el principal freno al retroceso del nivel de actividad. Este componente de la demanda global mostró una variación superior a la del trimestre pasado al subir 8,1 por ciento.

Si bien existen distintas definiciones, técnicamente se dice que una economía entró en recesión cuando el retroceso se registra dos trimestres seguidos en relación al trimestre anterior. Los datos del Indec para la economía local revelan un fuerte estancamiento pero no una recesión. En los primeros tres meses de 2009 el PIB creció 0,1 por ciento contra el trimestre anterior. Entre abril y junio el comportamiento fue el mismo. En el trimestre pasado la actividad no creció ni cayó. El Indec reflejó dos caídas consecutivas, pero fueron contra el mismo trimestre del año pasado: se trata de los períodos abril-junio, con una baja interanual de 0,8 por ciento, y julio-septiembre, con un retroceso de 0,3. De todos modos, en lo que va del año, en la comparación inte-ranual, el PIB todavía muestra crecimiento: 0,2 por ciento.

El ministro de Economía, Amado Boudou, sostiene que cuando finalice el año la economía habrá crecido alrededor de 0,5 por ciento. Los datos publicados ayer por el Indec muestran que la actividad económica retrocedió por segunda vez consecutiva en la comparación interanual. Sin embargo, la evolución positiva del EMAE –que funciona como anticipo del PIB– en octubre estaría evidenciando cierta recuperación en el nivel de actividad durante el trimestre en curso.

Los relevamientos realizados por consultoras privadas registran caídas más profundas que las estadísticas oficiales aunque los sectores golpeados son los mismos. De acuerdo a los informes de la mayoría de esos analistas –con metodologías y muestras no conocidas–, la economía estaría en recesión, aunque esos mismos analistas presentan escenarios de crecimiento para 2010.

El conjunto de los sectores productivos mantiene una tendencia negativa, aunque algunos exhiben una caída menor. En el tercer trimestre, la oferta global (el total de bienes y servicios disponibles en la economía) registró un retroceso interanual del 2,9 por ciento. Los sectores productores de bienes tuvieron una merma del 7,6 por ciento, mientras que el valor agregado de los sectores productores de servicios se incrementó 3,4 por ciento.

El sector de agricultura, ganadería, caza y silvicultura disminuyó 27,1 por ciento. Según sostiene el informe del Indec, la caída se debió principalmente a la baja en el agregado de cultivos agrícolas y servicios agrícolas. El comercio experimentó un alza del uno por ciento y la actividad del transporte observó una merma del 5,8 por ciento, aunque el comportamiento no fue uniforme en los distintos medios.

Durante el tercer trimestre el sector manufacturero retrocedió globalmente uno por ciento, pero algunas ramas como alimentos y bebidas crecieron. Las industrias de metales básicos cayeron 20,2 por ciento, la producción de maquinaria y equipo 13,3 y el sector textil alrededor del 10 por ciento.